"In my dreams I met you" (RyuFuyuBaji)

"Capitulo 1"

"Encuentros inesperados"

Bufe al escuchar cuando el profesor comenzó a hablar sobre su vida por millonésima quinta vez ¿Cómo no se da cuenta que no nos importa que se vaya a divorciar por segunda vez? ¿O que su hija no quiera estudiar medicina?

–Cállese viejo y mejor termine luego su clase– Suspire mientras recostaba mi cabeza encima del escritorio, gracias al sueño tan especial que tuve siento que no he descansado lo suficiente y las ganas de volver a dormirme me están ganando... o eso es lo que me proponía hacer hasta que un pequeño golpe en mi cabeza retumbo, a lo que al levantarme veo a mis compañeros aguantándose la risa, a un profesor con cara de pocos amigos y su mano apuntando hacia la salida.

–Tsk, ya la cague ¿cierto?– No creí que su cara pudiera cambiar de expresión tan rápido y antes de que dijera algo que me perjudicara tome mi bolso y salí rápidamente del salón. Ya afuera me relaje y me dirigí hacia mi escondite, el lugar perfecto para leer sin preocupaciones y esperar a que terminara la jornada escolar. Subí unas cuentas escaleras, doble hacia la derecha y abrí esa pequeña puerta de metal que me presentaba a hermosa y tranquila vista hacia las montañas de la ciudad. Me acomodé en mi esquina de siempre y comencé a buscar mi libro entre mis cosas, tenia que terminar ese tomo antes de ir a dormir para evitar lo de anoche. Ya con todo listo, mire una vez más la vista...

–Definitivamente este es el único sitio agradable de este lugar– Hable para mi persona disponiéndome a leer, pero –Mmm... así que no soy el único que viene a descansar a este lugar– Una voz desconocida interrumpió mis pensamientos e hizo que volteara a ver de donde provenía. Arriba de un muro divise una figura que gracias al sol me impedía verlo correctamente por lo que me acerque con intriga y una extraña sensación de ¿dejavú?

–¿Quién eres?– Mi boca se movió antes de que pudiera pensar e interrogué al tipo que ya podía ver claramente, un tipo con cabello esponjado y claro, tez morena acostado y se notaba el relajo en su cuerpo y como lentamente se movía en mi dirección, bajo su brazo de la cara y sentí como su miraba me observaba de pies a cabeza antes de responderme.

–Puedo ser quien tú quieras, chico lindo– Sonrió coquetamente cosa que en un segundo me saco de onda e involuntariamente sentí como mis mejillas se calentaban un poco ¿Chico lindo? ¿Quién mierda se creía este tipo al llamarme así? No pude evitar enojarme y acércame a él mientras tomaba su camisa entre mis manos.

–Chico lindo y una mierda ¿Qué te pasa imbécil?– Le grite apretando cada vez más su ropa claramente con ganas de pelear sin pensar que de un segundo a otro estaría en el suelo con el pie de este encima mío sin dejar moverme. Dios ¿Cómo es tan rápido y fuerte? No pude darme cuenta en el momento que me empujo y ahora era el quien me tenia apretándome debajo suyo.

–Suéltame, idiota– Le gruñí moviéndome de un lado a otro para sacarlo de encima, solo provocando una risa de su parte.

–No sé si quieres liberarte o hacer la danza de apareamiento de la lombriz– Escuche como trataba de controlar su risa provocando aun más mi ira. Ya al cabo de unos segundos la presión comenzó a disminuir y no tarde en pararme para quedar frente a frente a el pero esta vez con una pequeña distancia resguardando cualquier ataque sorpresivo. Chifuyu Matsuno no cae dos veces en la misma trampa. Orgulloso de mi mismo no pude evitar soltar una carcajada, olvidando por un momento la situación en la que me encontraba, la cual no se tarde mucho en recordar al escuchar el carraspeo de garganta del otro individuo haciendo que mi atención volviera a él.

–Bueno– Hablo el idiota sonriente. –Un caluroso primer encuentro y todo, pero lo que es yo– Escuche un leve sonido saliendo de ¿Su estómago? –Como escuchaste, me estoy muriendo de hambre y a no ser que tengas algo que puedas darme...– Me miro en espera de algo a lo que sin pensarlo fui directo a mi bolso en su busca, pero deteniéndome en un instante al caer en cuenta ¿Por qué le daría comida a quien me acaba de tumbar en el suelo?

–Mmm... que lastima– Meneo la cabeza mientras levantaba sus hombros en señal de rendición –Si no tienes comida tendré que ir a conseguirla a otro lado, pues espero volver a verte ¡Adiós!– Y de un segundo a otro el chico desapareció por esa puerta de metal que hace unos minutos atrás había recién abierto, dejandome con la palabra en la boca.

–Tsk ¿quien quisiera volver a verte, imbécil?– Murmure finalmente. Así que sin entender mucho lo que acaba de pasar, guardé mis cosas y me dirigí a la salida de igual forma. Esto muy fue raro... Nunca había visto antes a esa persona y definitivamente no quiero volver a verla, aunque si lo hago juro romperle su cara, ahora solo me tomo demasiado por sorpresa... si, eso fue, no hay forma que el gran Chifuyu caiga por una basura como esa.

Volví al salón de clases para pasar el ultimo periodo, ya iban a comenzar los exámenes y no podía decepcionar a mi madre llevándole malas calificaciones. Si bien últimamente no he estado hablando mucho con ella, sigue siendo la que me da dinero para mis mangas y cuida a Peke J cuando no estoy. Algo es algo ¿no?

Terminando con el ultimo timbre de la tarde, me estire en mi asiento y mire por la ventana en busca de alguien... Una cabellera negra y larga, una espalda grande y firme. Un ser que irradiaba respeto y mas encima tenia un nombre digno "Baji... Keisuke Baji" Lo conocí hace unos meses, no es muy inteligente pero un día me ayudo contra unos tipos que me atacaron en manada y luego de eso lo comencé a seguir a donde fuera.

Al poco tiempo me entere que pertenece a una pandilla de motociclistas llamada "Toman" aun que por mas que he intentado que me acepte como su mano derecha este se rehúsa, pero eso no me detendrá, hay un dicho que dice "El que sigue la consigue" y eso no me va a detener, Baji-san se dará cuenta que no hay nadie mas confiable que yo para proteger su espalda y me nombrara vicecapitán de la primera división para que juntos podamos golpear a los idiotas que se atrevan a desafiarnos... De solo pensarlo se me enchina la piel.

Deje de mirar por la ventana después de un rato al no verle y deje el establecimiento, hace dos días que no había podido coincidir con él y me pregunto si le habrá pasado algo. ¡¡Si yo estuviera a su lado no dejaría que sucediera per-AH!! Siento como mi cara chocaba con algo duro y detenía el fluyo de mis pensamientos.

–Mierda, mira por dond- ¡BAJI-SAN!– Detengo en seco mis insultos al percatarme como el chico de mis pensamientos se materializaba enfrente de mí, su figura se divisaba contra los últimos rayos de sol que se asomaban antes de desaparecer entre las grandes montañas de la ciudad pero definitivamente reconocería esa figura a donde fuera que estuviese.

Esto sin duda es el destino, no por nada unió nuestros caminos en este momento y yo que ya pensaba que el desagradable encuentro con el otro tipo era un mal augurio, si de tener que encontrármelo de nuevo significa volver a ver a Baji-san no seria tan malo al parecer.

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No pude evitar publicar el primer capitulo, la inspiración mijo la inspiración!!

Espero que les guste y cualquier comentario, critica o lo que sea será bienvenido, no le tengan miedo al exito.

Los espero<3