"In my dreams I met you" (RyuFuyuBaji)

"Capítulo 2"

"Salida improvisada"

La figura antes mencionada se gira para ver como aquel chico de cabello rubio y engominado se refregaba los ojos para tratar de enfocarse en él ya que por culpa de los últimos rayos de sol que se asomaban detrás de su espalda, este no podía verle correctamente. Un suspiro escapó de sus labios al solo pensar lo que este encuentro significaría... Escuchar un sin fin de cosas sobre: "Déjame ser tu vicecapitán, Baji-san" o "Vamos a derrotar a otra pandilla, Baji-san".

Últimamente no había dejado de perseguirlo y al ausentarse por dos días por temas referente a la Toman, se podría decir que había "descansado" de su nuevo seguidor. No era que le molestara en si de tan mala manera, pero si era un poco ¿Intenso? Si. Si tuviera que definirlo, en una palabra, definitivamente seria esa. Devolviendo su atención al menor, vio aquellos ojos brillando por su atención por lo que, en modo de compensación por haberse ido, le permitió que lo acompañara hasta afuera.

–Baji-san ¿Sucedió algo? ¿Por qué te habías ausentado tanto tiempo? ¿TUVISTE QUE PELEAR CONTRA ALGUIEN? SABES QUE PUEDES HABLARME Y YO T-...– El contrario lo paro en seco solamente con una mirada y este se callo de golpe, aprovechando ese minuto de silencio el pelinegro le respondió sutilmente:

–Estuvimos envueltos en una pelea que por factores externos se extendieron más de la cuenta...– Retomo su camino mientras hablaba, sintiendo como el otro le seguía un poco mas atrás. –Pero nada que yo no pudiera solucionar– Una sonrisa se formo en su rostro recordando como barrio con la mitad de la pandilla al final del día. –Además si necesitara ayuda, no serias alguien a quien llamaría, Chifuyu.– Declaro duramente Al menos no por ahora pensó.

Claro pensamiento que el rubio no escucho y solo se quedo con esas ultimas palabras retumbando en su cerebro. Esto era algo que ya se había acostumbrado a escuchar, desde la pelea que tuvo junto a Baji y este decidió seguirlo, cada vez que Chifuyu le decía que quiera ser parte de su pandilla o ser su vicecapitán, este era específicamente tajante al respecto negándose el exceso. Situación que aun que le causaba cierta tristeza, solo aumentaba mas sus ganas de poder demostrarle que él era alguien digno de cuidar su espalda.

El rubio en sus días anteriores de conocer a pelinegro, solo la pasaba aburrido... buscaba gente más fuerte que él, pero solo encontraba débiles, nadie cumplía sus expectativas y al final del día regresaba a su casa y repetía su vida monótona. Todo esto hasta ver la forma de pelear de contrario y sentir que debía seguirlo a donde fuera que sea, ese era su lugar, su nuevo motivo para ser y salir de la bruma. Baji Keisuke le dio el empujo de Chifuyu necesitaba para darle sentido a su vida y no lo perdería tan fácil.

Antes de que pudiera notarlo ya habían llegado al lugar de destino, una tienda cercana que quedaba entre la escuela y el camino a su casa. Vio como Baji entraba en ella y este lo siguió detrás sin decir ni una palabra. Noto como el contrario se agachaba ante una repisa de comida y desde el inferior sacaba dos pocillos de yakisoba y se las extendía.

–¿Me acompañas a comer? Yo invito, estoy que me muero de hambre– Hablo el mayor con una sonrisa al mismo tiempo que sonaba el estomago del rubio. –Por lo que noto no soy el único, esta bien. Por hoy te daré el honor de comer junto a mí– Termino de hablar para dirigirse a pagar todo y comenzar a prepararse los yakisoba.

Al salir caminan un poco más hasta llegar a la orilla de un rio, donde Baji se sienta finalmente y comienza a comer, el menor no lo duda mucho e imita su acción, abriendo su pocillo mientras mira al contrario ya con mas de la mitad terminada.

–AHH... Definitivamente no hay nada como un buen platillo de yakisoba luego de una buena pelea– Confirma a su vez que se recuesta en el césped del lugar. –No dudo que esos tipos molestos se atreverán a meter sus narices por estos lados en un buen tiempo– Se mientras orgulloso ante tal acción y el menor ríe al ver su cara de satisfacción.

–Tipos molestos eh...– Hablo para si mismo, Chifuyu sabe sobre tipos molestos. Siempre se había estado topando con ellos, pero siempre lograba deshacerse de ellos de cierta manera. De todos menos uno. El chico de cabello alborotado que se había encontrado ese día. –Tsk, ese tipo... Juro que si me encuentro otra vez con él esta vez si que lo hago tragar mierda– Soltó en voz baja, pero logrando captar la atención del pelinegro.

–¿A quién vas a hacer tragar mierda, Chifuyu?– Pregunto con cierta curiosidad, a pesar de siempre verlo motivado por pelear junto a él, casi nunca demuestra ese tipo de reacción ante una persona con la que quiera enfrentarse, por lo menos no que allá visto antes y de cierta forma era intrigante.

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Y aquí volví ya con otro capitulazo, ya quiero comenzar a meter más personajes pero ahhhh, no se a quien de todos.

Bueno, espero que les guste, bye bye<3