Maze | lee felix ✔️

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—¡LEE FELIX!

—Iba a preguntar si Felix estaba en casa... ahora sé que sí.——JiSung suspiró dejando sus llaves en un mueble cercano. SeungMin y compañía entraban junto a él.

—Me van a volver loco.——MinHyuk usaba orejeras.

—¡AH, NO ME JALES MI CABELLO! QUEDARÉ CALVO.

—¡PUES DAME MI BRASIER!

—¿Cómo ha estado todo?——JeongIn sacaba platica.

—Bien, hemos estado bien... sólo queda una semana y que empiece la escuela otra vez.——JiSung suspiró.

—¿Y JiHye?

Encima de ella, Felix la besaba, jaloneó su labio tirando de él.

—¡NO SEAS BRUSCO!

Rodando por las escaleras, cayeron hasta donde se encontraban sus amigos.

—¡TE VOY A DESFIGURAR TODA TU CARA DE MODELITO QUE TIENES!

—¡NO, TODO MENOS MI CARA! LITERALMENTE DE ESO VIVO.

—¡JiHye!——JeongIn corrió a abrazar a su amiga.

—¡Hola! ¿Te has alimentado bien?——ignoró al muchacho con el que peleaba para saludar a sus amigos.

Felix se sentó en las piernas de SeungMin.——¿No te gusta lo que ves?——modelaba coquetamente.

—¡LEE, QUE DEJES MI BRASIER!

Volvieron a pelear. HyunJin negó suspirando.——¿Ya pensaron en que Universidad se inscribirán?

—Yo trabajaré, no tengo muchas ganas de volver a estudiar...——JeongIn confesó.

Jaloneaba la prenda intentado quitarlo, el otro se negaba a dárselo carcajeando.

—¡Estoy jalando y harás que se rompa! ¡Es mi favorito!

—¡Pues deja de jalar!

—¿Por qué dejaste que lo tomara en primer lugar?

—¡Estaba acomodando mi ropa limpia y él empezó a fisgonear!

MinHyuk los miraba pelear arqueando una ceja.

—¡Lee! Hablo enserio... ya dámelo, lo romperas, ¡Y si lo rompes tendrás que comprarme 10!

Charlaron sobre el incidente que HyunJin contó de la fiesta pasada. MinHyuk se molestó junto con JiSung. No podían creer el descaro de aquel idiota para buscarla e insistir con ella. Se molestaron aún más cuando escucharon que JiHye no permitió que Felix hiciera algo.

El ruido de un golpe les hizo girar a ver a la pareja otra vez.

Felix había golpeado a JiHye sin querer con su codo.

Puso sus manos en su rostro por el dolor, la chica empezó a quejarse.

—¡A-Amor! No fue intencional...——gateó hasta ella, lanzando lejos el sostén que tenía los tirantes bastante estirados.