Capítulo 31 - Mutuamente

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Se escucha como tocan la puerta del apartamento de Callie, probablemente era la rubia.

-Debe ser ella - Dice Callie nerviosa.
Callie estaba maravillosa, tenía un vestido rojo brillante, corto de mangas sisa que resaltaba su figura tan escultural.

-Respira Callie - ríe Adisson al ver lo nerviosa que estaba - Todo saldrá bien

-Te amamos ! Suerte - Meredith deposita un beso en su mejilla

-Hoy es noche de sexo - George reía desde el sofá

-GEORGE - Las chicas en coro

-Voy a abrir - la morena avanza hasta abrir la puerta -Hola Arizona
Callie queda perpleja al verla, la rubia llevaba un vestido negro de tiras, ajustado y corto, podíamos ver como sus pechos pedían a gritos salir de ahí, eso provocaban mil cosas en la morena. Su cabellera rubia ondulada bajaba hasta llegar a sus pechos haciendo que la doctora se viera más preciosa que nunca y Callie perdiera los sentidos.

-Calliope... te ves perfecta - Una rubia sonreía fascinada
La morena no se quedaba tras, el rojo era su color, el vestido ajustado que traía exaltaba su perfecta piel morena, su cabello corto ondulado estaba perfectamente peinado y bajaba por sus hombros, podía apostar que Callie robaba las miradas de todos.

-Tu estás radiante - Callie sonreía de una manera embelecadora

-¿Nos vamos ? - pregunta con una sonrisa

-Nos vamos - Asiente y toma su mano

Arizona con cautela abre la puerta de copiloto en su auto, para que la morena entrara y ella vuelve a la puerta del piloto.

Mientras iban hacia el hermoso restaurante, escuchaban canciones de Adele a máximo volumen, ambas eran fanáticas y hacían opiniones muy graciosas.

Arizona se estaciona frente a un restaurante muy elegante, con luces llamativas y rosas en la entrada.

Las chicas entran
-Señorita Arizona, que buena tenerla por acá - Decía un muchacho elegante, al parecer trabaja allí

-Hola Steve ¿Que tal la familia? - pregunta Arizona muy interesada

-Muy bien, mi pequeña Cassie cumplió 5 años la semana pasada, le encantó el regalo que le mando estamos muy agradecidos - El muchacho sonríe

-Espero verla pronto para el control de crecimiento- Arizona sonríe

-Allá estaremos sin falta - El chico asiente orgulloso

-Ellas es Calliope, mi cita de esta noche - Arizona presume a Callie como si fuera un trofeo, no se merece más con ese vestido
¿Que tal si se lo arrancó? Pensaba Arizona

-Un gusto señorita, Bienvenida a Robbin'zone- El chico le da una cálida sonrisa

¿Robbin'zone ? pensaba Callie
-El gusto es mío - sonríe la morena

-Veo que hizo una reversevacion doctora - leía en un cuaderno - Por aquí - El chico camina hacia una terraza y las mujeres lo siguen y Arizona con una sonrisita pícara

-Aquí está su mesa, que lo disfruten - El chico se para en una mesa muy elegante, frente a la terraza decorada por unas luces colgantes , que tenía una vista maravillosa, la noche de New York se veía más iluminada que nunca, el cielo iluminado por la luna y estrellas.
Callie podía sentir como sus mejillas se sonrojaban, una sonrisa involuntaria salió de sus labios, no podía controlarla era tan hermoso lo que sentía, era como si su corazón automáticamente comenzara later por la rubia.

-¿Te gusta?- Dice la doctora mientras en sus ojos se podía ver los nervios que sentía

Callie la miro a los ojos, los ojos de Callie brillaban era como ver su corazón en ellos
-Arizona es hermoso, nadie había hecho eso por mi - Sonríe Callie

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