Countryhumans - México Ships. [México Male]

Mi hermanito mayor. [ M y F ]

México y Filipinas. No ship.

Durante la época colonial, fuimos controlados bajo el mismo título, juntos éramos la Nueva España, el favorito de Imperio Español para ser saqueados y aislados de las demás colonias. Moría de miedo, siempre tuve miedo, pero por suerte no estaba sola. Estaba él a mi lado, haciéndome sentir segura.

— Nueva España, ¿Qué crees que haya más allá de nuestras tierras?

— Hmm... — el futuro mexicano reflexionó antes de responder, luego, dándole una mordida a su manzana y pasando el bocado, levantó los hombros dándose por vencido. — No te mentiré, no tengo la menor idea de lo que habrá. Pero me imagino que son muchos más territorios, como el de Reino de Guatemala, esa niña que a veces viene. Me pregunto si tú tendrás vecinos en el territorio que debes prepararte para guiar.

— Le pregunte a padre si eso era cierto, pensé lo mismo que tú, pero él se enojó y me dijo que no debía ser tan curiosa. Dijo que mi deber era estar en casa y callarme, no preguntarme cosas innecesarias.

— Imperio Español es un idiota, no debes hacerle caso. Tú puedes preguntarte cuanto quieras, pero él es un monstruo que cree que debes hacer lo que él dice.

Reino de Filipinas sonrió, su "hermano" jamás le callaba, sino que la escuchaba y resolvía las dudas que podía. Si bien no eran hermanos de sangre, se hacían llamar hermanastros por compartir la colonia que eran, la famosa Nueva España. Reino de Filipinas prefería que le llamaran a su hermano como "Nueva España" ya que era menos difícil confundirse así. Y que le dijeran "Capitanía General de Filipinas" sonaba aburrido y largo para ella, así que prefería "Reino de Filipinas".

Siempre supe que mi hermanito mayor tenía un gran impacto con las mujeres, no solamente por su físico, sino que era un caballero muy amable y refinado para su edad en ese entonces. Guatemala (que en ese entonces era Reino de Guatemala) era de las más obvias, aunque quizá para él no lo era, y es que mi hermanito era despistado para esas cosas. También supe que, en una ocasión que regresé a mi territorio, tuvo algo que ver con España, la descendiente de Imperio Español. Padre había estado furioso cuando lo supo, en ese entonces ya éramos unos adolescentes y España nos caía bien. En otra ocasión mencionó a otra mujer, pero jamás volvió a mencionarla, y no encontré valor para preguntárselo de nuevo.

Estoy segura de que lo que yo sentí en ese momento fue curiosidad. España era algo así como nuestra hermanastra también, pero jamás la tomamos como tal, nosotros no éramos descendientes de Imperio Español y ella sí. Me emocioné un poco cuando descubrí que Reino de Guatemala se sentía atraída por Nueva España, nunca vi mal si mi hermanito tenía coqueteos, pero por alguna razón saber lo de España y él me llenó de curiosidad. ¿Qué era lo que hacía que mi hermanastro fuera tan buscado por las damas? Siendo tan jóvenes... Entonces recordé una plática que tuve con España, una que sin querer logró darme más curiosidad por saber la razón.

— Hermanito... ¿Qué se siente besar?

El varón se ahogó con su propia saliva, por lo que comenzó a toser con violencia mientras palmeaba su pecho. Reino de Filipinas se acercó a ayudarle, palmeando su espalda sin lastimarlo. Después de unos tortuosos segundos, por fin pudo regresar a la normalidad. Ahora el de sangre azteca regularizaba su respiración mientras la contraria lo miraba, esperando su respuesta.

— Por los Dioses. Muñequita, ¿qué clase de preguntas son esas? ¿No quieres preguntarme mejor de nuevo por los barcos? Incluso puedo explicarte como hacen ese pan que tanto te gusta. — decía mientras mantenía una mano en su pecho, sintiendo su corazón cada vez latir más a su ritmo normal. Cuando Reino de Filipinas negó, supo que tendría que responder a esa pregunta tan extraña sí o sí, no le gustaba dejarla con dudas y permitir que recurriera al Imperio que los gobernaba. — Pues, besar se siente... Es difícil de explicar. — soltó un suspiro, sentándose mejor sobre la cama. — Mira, es como cuando disfrutas de un pan. La sensación es suave, y si ese pan te gusta, entonces verás que es agradable y te gustará aún más probarlo. ¿Me entiendes?