𝗣𝗨𝗭𝗭𝗟𝗘: 그는 퍼즐이다

2. La vida es igual.

dos años después

Voy camino al hospital mientras escucho música tranquilizante, después de tantos años sin poder ver a este chico me encuentro en el camino.

Llego a mi destino en menos del tiempo del que creí, antes de bajar del coche me encuentro arreglando mi cabello mientras le pego un sorbo a mi aún humeante café. Sacudo mi cabeza y palmeo mi propia mejilla antes de dejar mi café en el mismo lugar donde estaba.

me abroche el abrigo y me puse la bufanda para poder entrar al hospital, llevaba el cubrebocas puesto para que mi frío aliento no saliera de mi boca y obviamente para no pescar ningún tipo de enfermedad y terminar peor que Daehyun.

Daehyun se vio involucrado en un accidente automovilístico donde perdió una gran cantidad de sangre, estuvo muy grave durante semanas en el hospital hasta que por fin encontramos a un donante activo que ayudo a este pobre muchacho.

Estaba caminando escalón tras escalón con prisa para llegar a Daehyun, las enfermeras solían verme, así que Daehyun solo me dijo que tuviera cuidado con las enfermeras que me miraban con deseo cuando entraba a la habitación de el.

Daehyun era un buen chico, un buen chico al cuál debía obedecer. 

Llegue a la habitación y abrí la puerta, cuando la cruce, pude ver millones de peluches y flores alrededor de la camilla de Daehyun, me sentía culpable por tan solo llevar un sobre con pequeñas flores que me había encontrado en el patio de un jardín que mi hermana había comprado aquí en Seúl. 

El me miro parado en la esquina de la puerta y me invito a entrar y sentarme en las silla para visitantes colocada a un lado suyo, la silla era de asiento acolchonado y de alguna manera algo incomoda, pero estando a un lado suyo todo me parecía como el cielo.

Estábamos viéndonos el uno al otro sin saber que decir, yo rodaba mis dedos debajo de mi abrigo sin saber que hacer o que decir, lo miraba y sonreía con sonrojo en mis mejillas. En un momento perdí mi miedo y pellizque una mejilla del contrario con delicadeza para no lastimarlo, mantuve mi mano cerca de su pecho cuando el la tomo y la coloco sobre sus muñecas.

— Te extrañe.. — Rompió el hielo.

— Yo igual, pensé en ti cada segundo..

— ¿Te cuidaste de las enfermeras?

— Si, jeje, me cuide de ellas por ti.

— jeje, no vuelvas a dejarme una semana...

— lo siento, no fue lo que quería hacer.. Pero para compensarlo te traje algo..