A un centímetro de tu boca

derrumbe

Naruto: sobre mi cadáver, ahora es mi mujer

Hiashi: nada que no pueda solucionar

Ahí me quede sin moverme tras mi esposo, en mi mente todo se estaba derrumbando nuevamente

Naruto: vamos a tener un bebé, eso no es tan fácil de solucionar.

Hiashi: Naruto, sólo aléjate de ella.
Tengo su vida planeada y nada ni nadie va a poder detenerme.

Siento un escalofrío en mi espalda y una mano que pasaba por mi espalda.

Toneri: que hermosa sorpresa, tendremos un hijo...

Hiashi: hijo, pasa...

Toneri entra en la casa pasando por mi lado y de Naruto....

Nos ponemos hombro a hombre tomados de la mano.

Naruto: que quiere señor?
Dinero? Se lo puedo dar, solo déjela en paz...

Hiashi: no naruto, la necesito a ella sea como sea... hija te presento a tu marido... Toneri. Toneri, aquí tienes a tu familia.

Mi padre me apuntaba

Hiashi: hija, el embarazo te sienta bien

Hinata: papa por favor basta

Me arrodillé y llorando le suplicaba que por favor me dejara en paz.

Toneri: Hinata, te haré muy feliz.

Naruto: no te atrevas a tocarla, Hinata vamonos...

Me levantó del suelo y salimos de ahí a paso rápido.

Cuando nos dimos cuenta, estábamos rodeados de hombres.
Mi padre ni se molesto en salir detrás de nosotros.

Toneri: ya esta todo organizado, todo listo...

Y mientras pronunciaba dichas palabras sacaba un arma de su bolsillo apuntando a mi amado Naruto.... la gatilla y dispara. Todo fue tan rápido, naruto ni si quiera había notado dicha arma
Salto cubriendo a  Naruto intentando evitar tal desgracia.

Naruto: nooooooooo!!
Gritó

Salió mi padre a admirar la escena.
Definitivamente Toneri había ido mucho más allá de lo que tenían acordado.

Hiashi: que has echo, que le hiciste a mi hija.

Toneri: fue un error, solo me quería deshacer de Naruto.

Naruto: amor, amor... quédate conmigo.

Habíamos caído al suelo, Naruto estaba debajo de mi sosteniendo mi cabeza que parecía sin vida.

Sirenas y helicópteros se escuchaban...
Toneri avisó  a sus hombre y escaparon en lo que pudieron.
Mi padre no sabía que hacer

Unos minutos después Naruto pedía ayuda y corría conmigo en sus brazos.

Naruto: no me dejes amor, tu puedes

Y cuando todo parecía oscuridad, Minato aparece corriendo

Minato: hijo, hijo... lamento llegar tarde.

Una ambulancia se acercó y me subieron.

Medico: la bala impacto el hombro derecho, ha perdido mucha sangre.

La ambulancia avanzaba con rapidez al hospital de la isla.

Al llegar intentaron estabilizarme, me conectaron unas máquinas y me trasladaron en avión.
Habíamos vuelto a nuestro país, en la peor situación que podíamos estar, pero al menos seguíamos juntos.
Al parecer lograron rastrearnos, cuando Minato se dio cuenta ya le llevaban ventaja.
La eficiencia de mi suegro logró traerlo en pocas horas a la isla y ayudar en lo que más pudo a pesar de que no se pudo evitar el gran daño que nos hicieron.