Éste y el resto de los capítulos son dedicados especialmente a: Charlie J. Leffaut.
(...)
Bajando del aeropuerto con el peor estilo ya que mi cabello anduvo de muy rebelde durante el camino y mis manos ocupadas cargando grandes bolsos de mi equipaje, una con la ropa que la cual no cargaba mucho y la otra era el estuche con mi guitarra adentro.
Caminaba a todos lodos con esa tremenda y grandísima duda de: ¿y ahora dónde iré?
Sólo veía más y más gente apresurada, bolsos colgando, y madres con bajo humor tomando la mano de sus hijos con su pasaje en otra mano.
Y sólo seguía ahí parado...
Sin embargo, no podría quedar ahí parado más tiempo así que decidió a ir a preguntar a una mujer mayor que trabajaba en el lugar, con tremendas arrugas y el cabello completamente desordenado; pobre señora...
–Disculpe, señora. –dije, interrumpiendo su grato momento de ordenar los pasajes que se veía de muy lejos que no estaban muy bien ordenados además que se reconocía que estaba apresurada con su trabajo. Quizá sea gerente–. ¿Me podría decir donde pueda hospedarme? Que sea económico y de buenos servicios, por favor.
No consiguiendo respuestas...
–¿Señora? –repuse nuevamente buscando atención, consiguiendo mis hechos en vano.
La verdad que insistir no era lo mío, sin más preámbulos salí de la aerolínea y justando mis lentes de sol decidí caminar por un rato. Recordé que tenía unos cuantos libras, podría comprar algo que sea necesario.
Caminé hasta unas tiendas, atrayendo mucha admiración a cierta cultura, aunque el hecho de que no podía resistir a no ir a McDonald's no era nada de malo... supongo.
Así que, mientras disfrutaba de una sabrosa hamburguesa podía detallar como un chico, muy adorable en su aspecto entraba al restaurante con un buzo color azul y lindos rizos color café; juraba que me hacía muy similar. Y mientras detallaba con la mirada al momento de irse a la caja a pedir su comida, traté de disimular; hasta su voz me hacía conocida.
–Aquí tienes su pedido, señor Styles. –dijo la cajera entregándole el pedido que había ordenado y a la vez tomó su dinero.
¡Styles! ¡Harry Styles! ¡El chico de la tienda de los cupcakes! ¿Qué estará haciendo por acá en Bradford?
–¡Harry, Harry! –exclamé lo más bajo que pude para conseguir su atención–. ¡Harry, por aquí!
Por suerte, el chico rizado al momento de abrir la puerta se giró ya escuchando su nombre, así que alcé mi brazo para que pueda verme y así ir a mí, lo hizo con una linda sonrisa; típico de él.
–¡Niall! ¿Cómo has estado, rubito? –preguntó emocionado en mi presencia, acercando mi mano hasta mi cabello para así acariciarlo de forma cariñosa.
–Todo ha estado genial, ¿qué haces por acá? Creí que te habías mudado a California ¿No?
–Pues, al parecer me pareció mejor este lugar que en California, es tranquilo y conseguí quedarme en un departamento, ¿tú en dónde vives, rubio?
¡Demonios, no tengo dónde quedarme!
–Me alegro de ello, –dije con una linda sonrisa de la noticia–. Y yo, pues... no tengo dónde quedarme, apenas llegué hoy.
–O sea que, llegaste acá como si nada y no sabes en dónde quedarte, ¿cierto? –interrogó alzando una ceja.
–Exacto, ricitos.
–No me molestaría tener un compañero de cuarto sabes, tendría mucho gusto que te quedaras conmigo, de todos modos somos amigos aún ¿Te parece? –preguntó de la manera más amable que haya visto, aunque está de más su ternura con esos rizos.
–No lo sé, –respondí muy dudoso con la pregunta–, ¿estás claro de con quién compartirás habitación, eh? Tal vez a los días te parezca molesto o insoportable.
–¡Vamos, Niall! Ambos somos insoportables, ¿por qué no mejor compartir y seamos molestos los dos?
Créanme que eso sí me atrajo mucha atención.
–Bien, lo haré. –asentí mientras sonreía a medias–, de todos modos, no me molestaría un chico con esos ricitos de dulce.
Haciéndonos reír por mi comentario, tomé el desperdicio y fui a tirarlo a la basura para así irnos rumbo a su casa en taxi, un largo viaje de preguntas...
Lo que necesito es un trabajo ahora...
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Song In Real Life | Ziall.
Teen FictionTodos comúnmente odiamos nuestra escuela. Pero, ¿serías capaz de trabajar como maestro y de pronto conseguir al amor de tu vida? O hasta mejor, como el hermano de uno de tus alumnos. Una historia donde todo se puede, mediante una canción y un inmens...