CAPÍTULO 4

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Alice y Jean caminaban mientras el silenció reinaba en ellos. Ella se puso un poco nerviosa así que decidió romper con aquella tensión

—AMM.... —trate de hablar un poco nerviosa— Y como te llamas?

—S...Soy Jean Francois Arnault

—Mucho gusto, yo soy Alice Campbell

El chico solo asintió un poco nervioso, aunque el le quería decir muchas cosas, las palabras no le salían. Ambos volvieron a quedar en silencio, pero Alice no se daría por vencida

—Jeremy es muy tierno

—S...Si lo es

—Sabes.... Me dijo algo sobre ti

—S...Sobre mi? —pregunto confundido mientras me volteaba a ver—

—Dijo que te gustó

Alice sonrío al ver como la cara de aquel chico se puso roja mientras reía con nerviosismo y desviaba su mirada

—Que hermosa sonrisa tienes —dije mientras lo veía—

Aquella frase de la rubia rompió aquella tensión haciendo que ambos chicos hablaran de cosas triviales mientras caminaban hacia el hotel. Unos minutos después llegaron al gran Hôtel Plaza Athénée

—B...Bueno —dijo mientras se rascaba la nuca— Te traje sana y salva

—Muchas gracias Jean —dije con una gran sonrisa— Me prestas tu celular?

—C...Claro —dijo mientras me lo daba—

Alice agarró el celular ante la atenta mirada del chico que no sabía que es lo que estaba pasando

—Listo —dije mientras se lo daba— Ese es mi número —sonreí— Llamame cuando quieras

Alice se acercó a Jean mientras se paraba de puntas para poder darle un beso en la mejilla. Jean quedo muy sorprendido, no se movía para nada mientras por dentro estaba gritando eufórico de la emoción

—Me llamas —dije mientras caminaba a la puerta del hotel— ERES MUY GUAPO —sonreí tiernamente—

Jean sonrío ampliamente mientras un leve sonrojo se asomaba en sus mejillas, al ver que Alice se desapareció de su visión pudo reaccionar como quería

—MI CRUSH ME BESÓ!! —grito emocionado—

—Y le dijo guapo joven —agrego uno de los trabajadores del hotel—

—La escuchó? —pregunto emocionado— Hoy es el mejor día de mi vida!!

Alice entro a su habitación mientras sonreía como una tonta por lo que acababa de hacer con un desconocido que definitivamente le había robado el aliento en cuanto lo vio y no se quería quedar con las ganas

—Que son estas horas de llegar?! —pregunto muy alterada Ashley— Me tenías muy preocupada Alice —dijo mientras me abrazaba—

—Me quede sin batería —dije y me aventé a mi cama—

—Que te ocurre? —pregunto confundida—

—Creo que me enamoré —sonreí embobada—

—QUE?!!

Los meses pasaron y Jean & Alice se hicieron muy cercanos al punto de iniciar una relación, ambos estaban muy felices pues se complementaban a la perfección y al amor entre ellos crecía más y más. Pasaron algunos meses desde que iniciaron su relación, Jean ya había asumido el mando de la empresa de su familia y Alice seguía trabajando en campañas de marcas de ropa de alta gama que curiosamente todas ellas se hicieron en Francia. La relación de ambos iba en tan buen camino que decidieron dar el siguiente pasó que era presentarse a sus familias. Alice ya había conocido a la familia Arnault quienes estaban muy felices ya que Jean nunca había tenido novia y sus padres al saber que su primogénito se había enamorado de una de las herederas de los Campbell no pudieron sentirse mas felices aunque no lo dijeron. Ahora era el turno de que Jean conociera a lo Campbell en unos de los restaurantes mas prestigiosos de Londres. El hecho los ponía muy nerviosos pues el padre y el hermano de Alice era muy celosos con sus princesa

—Y quien es tu amigo hermanita? —pregunto Thomas—

—No es mi amigo —conteste mientras reía levemente— El es mi novio —sonreí mientras agarraba la mano de Jean—

—Mucho gusto —sonrío un poco nervioso— Mi nombre es Jean Francois Arnault

—TU QUE?!! —gritaron Thomas y Charles—

—Mi bebé por fin tiene novio!! —grito emocionada mi madre—

—Esto no lo vi venir —menciono muy sorprendido mi mejor amigo Liam—

—AUN ERES UNA BEBÉ —grito muy celoso Thomas—

—NO PUEDES TENER NOVIO!! —grito mi padre con los celos al tope—

—I'm sorry —dije restándole importancia— Ya lo tengo!!


2017

—Yo Jean Francois Arnault —dijo mientras me ponía la argolla— te aceptó a ti Alice Campbell como mi esposa

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—Yo Jean Francois Arnault —dijo mientras me ponía la argolla— te aceptó a ti Alice Campbell como mi esposa. Y prometo serte fiel en las alegrías y en las penas, en la salud y en la enfermedad y amarte todos los días de mi vida

Finalizo mientras le rodaba una lágrima por la mejilla

—Yo Alice Campbell —dije mientras le ponía la argolla— te aceptó a ti Jean Francois Arnault como mi esposo. Y prometo serte fiel en las alegrías y en las penas, en la salud y en la enfermedad y amarte todos los días de mi vida

—Antes de continuar preguntó. Si hay alguien que se oponga a está unión, Que hable ahora o que calle para siempre

El silencio reino en aquella iglesia mientras la pareja de enamorados sonreían con emoción

—Jean Francois Arnault aceptas a Alice Campbell como esposa, y prometes serle fiel en las alegrías y en las penas, en la salud y en la enfermedad. Y amarla y respetarla todos los días de tu vida?

—Aceptó!! —contesto Jean mientras sonreía con los ojos cristalizados—

—Alice Campbell aceptas a Jean Francois Arnault como esposo, y prometes serle fiel en las alegrías y en las penas, en la salud y en la enfermedad. Y amarlo y respetarlo todos los días de tu vida?

—Aceptó!! —conteste mientras sonreía—

—Que el señor confirme con su bondad este consentimiento que han manifestado ante la iglesia y cumpla con ustedes su bendición. Y lo que Dios acaba de unir no lo separé el hombre. Yo los declaró marido y mujer —dijo el sacerdote mientras sonreía— Puedes besar a la novia

—Te amo dulzura —dijo Jean mientras me agarraba de las mejillas—

—Yo te amo mucho más —conteste con los ojos cristalizados—

—Te prometo que siempre te haré muy feliz

—Si estoy contigo, yo soy feliz —conteste mientras sonreía

Jean se acerco a su ahora esposa para unir sus labios en un tierno besos donde se demostraban el gran amor que se tenían

—Lo cumplió —dijo Jerome mientras sonreía— Se caso con su crush

—Me encantan los finales felices —dijo Jeremy mientras se secaba las lágrimas traicioneras qué había derramado—

MI SEGUNDA VIDA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora