El Raro Juego del Destino

Capítulo 2

Unos minutos después llegan los paramédicos junto con la policía para revisar los cuerpos y confirmarme lo que ya sabía que había pasado, de pronto se acerca un policía hacia mi y me habla:

-¿Hijo puedo hacerte unas preguntas?

-S-si.-dije balbuceando ya que entre llanto y pensamientos se me dificultaba hablar bien.

El policía procedió a preguntarme cosas de las que habían sucedido en ese momento, no pude llegar a responder todo lo que me preguntaba ya que sentía que mi cabeza iba a explotar al recordarlo, con tantos pensamientos en mi mente que no me dejaban formar una oración coherente, en pocas palabras, aun estaba en shock.

No sabia que responder ya que por mucho que estuviese en shock aún así no sabía exactamente que había pasado, le conté brevemente lo que había escuchado en ese incidente hasta la parte en que salgo de la casa y veo morir a mi hermano con su novia.

El perplejo me mira y no le queda más remedio que trabajar con esas pistas y darme el pésame.

-Hijo lo siento en verdad, no se que decir, intentaremos encontrar a los responsables.

-Está bien...

En realidad no sabe que decir porque no tiene idea de lo que se siente ver morir a alguien de tu familia en tus brazos, o tal vez si?...

-Sube-dijo, Su voz me saco de mis pensamientos.

En ese momento el oficial me pidió que subiera a la patrulla para llevarme a casa de un familiar, le dije que me llevara junto con mi tío (que hasta ahora era el más cercano a nosotros), mientras iba conduciendo, yo estaba mirando por la ventana recordando a mi hermano, las cosas que dijimos que hariamos, las metas que el tenía, él y su novia tenían mucho por qué vivir, no podía evitar sentirme mal con todo esto pero tenía que dejarlo ir de alguna manera aunque no sabia cómo.

El policía se detiene en casa de mi tío, me deja justo en la puerta y me acompaña mientras sale mi tío.

Espero un momento hasta que mi tío Caleb sale de la casa, me mira a mi con cara de confusión y luego mira al oficial.

-En qué puedo ayudarlo oficial?-en ese momento el policía empieza a contarle la historia.

La tristeza inunda la expresión de su rostro junto con unas lágrimas que se desbordan de sus ojos, pero éste intenta reprimirlas con todas sus fuerzas.

Justo cuando se va el oficial, se acerca hacia mi, me abraza y empieza a llorar como un niño, al parecer la perdida le había afectado tanto como a mí.

Mi tío era el menor de los hermanos de mi padre, mi hermano nació 2 años después de su nacimiento así que se llevaban como hermanos antes de que yo naciera, por eso era el más cercano a nosotros de la familia.

Entre sus gemidos y lágrimas no me pude contener y empecé a llorar junto con el, esto siguió hasta quedarnos dormidos.

A la mañana siguiente ya todos en la calle junto con mis familiares estaban enterados de la noticia a todos los tomó por sorpresa y justo ese mismo día en la tarde hicieron su entierro.

****

-Jeffrey y Brianna fueron buenos chicos, tuvieron una vida bastante corta pero muy llena de oportunidades, "Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todo los días de mi vida y en la Casa de Dios moraré por largos dias" y no tengo miedo de donde estarán Jeff y Brianna porque Dios estará con ellos acompañandolos en su Casa-Dijo el pastor citando el Salmo 23 de la Biblia

-Ahora Matthew quiere decir unas palabras.-dijo llamándome al púlpito.

Mientras voy pasando veo a los familiares de Brianna en frente de las personas que estaban allí, aun llorando la muerte de su hija, en ese momento su madre me dirige una mirada de tristeza y la entiendo porque ambos sentimos ese dolor punzante que no se va con ninguna medicina, ese dolor tan difícil de sanar.