El último de los rostros ensangrentados fue plantado directo en la pared del almacén donde se dio el enfrentamiento, y, a su alrededor un mar de lo que cataloga como imbéciles se retuerce de dolor y agonía, algunos incluso ya han muerto. No le importa particularmente la vida de personas así, de hecho los buscó por esa misma razón.
Ya acostumbrada al trabajo de espionaje y la forma en que las personas se comportan fue fácil encontrar un nido de, de nuevo, imbéciles para matar el tiempo. Sabe que hay mejores formas de gastar sus días libres pero es que sencillamente no encontraba la forma de quitarse de la cabeza toda la molestia que había en ella.
Mientras que el resto fue a la playa o encontró una forma de conciliar el ya no estar en su mundo anterior ella simplemente no puede hacer algo así. Cuando piensa en su mundo natal, en su gente y lo que lograron al finalizar la Guerra quiere extrañar ese mundo y sentirse triste pero no lo consigue, apenas y le importa el ya no verlos más y eso la aterroriza, no sabe sí es ella la que es una maldita o si hay algo mal en su cabeza.
¿Qué clase de hija no extraña a su cariñoso padre?
Ella, al parecer, es esa clase de hija. Es extraño en muchas formas; durante su estadía en Paradise encubierta siempre pensó en volver y decirle que estaba en casa, de hecho logró abrazarlo al finalizar la Guerra contra Eren, pero ahora por más que busca ese sentimiento no consigue sentirse así, no consigue extrañarlo, sentir que quiere volver a su hogar y eso la carcome.
"Vaya, vaya, eso no es lo que uno llamaría vacaciones, honestamente." Un poco sorprendida pero aun manteniendo su cara de póker, simplemente miró girando los ojos directo a la persona que le hablaba, uno de sus compañeros aunque de un mundo diferente; Dazai Osamu.
Lo estudió un poco. "¿Cuánto llevas ahí?" La pelea duró poco más de 10 minutos, había 32 imbéciles pero le fue difícil provocarlos a todos.
"En realidad acabó de llegar, justo cuando le clavabas el rostro en la caja al tipo de allá, unos 2 minutos diría yo." Caminó sin miedo hacia ella. "Entonces, sé que sabes que no podemos hacer cosas como está, entonces lo que es interesante es por qué hacerlo de todos modos, ¿No es así?"
"¿Quieres jugar al detective conmigo? Paso, esto solo es una coincidencia."
"Por supuesto, como una bala impactando a alguien luego de estar frente al arma, solamente es matemática probabilista, pero las personas somos más simples que la física misma, Leonhart-san, el que hayas venido a una zona como esta indica que ya sabias que pasaría, ¿Fue un impulso o un desquite?"
"Hablas mucho para alguien que debe mantenerse oculto..."
"La elocuencia es un arma afilada si se usa bien."
"¿Estoy siendo apuntada con un arma?"
"Precisamente." Un clic audible en el entorno, un arma de pulso. "La cosa es que, hay una Servant en camino a este lugar por el alboroto que hiciste, ¿Es tu objetivo?"
"¿...Objetivo?" Su mirada se endureció.
"¿How...? Entonces quieres encontrarte con él sin que los otros se enteren, la forma más fácil es romper las reglas en el día que prometió no llamarlos para nada, así ellos no se enterarían, que forma tan embustera de pensar, Leonhart-san." Ni un solo momento Dazai dejó de apuntarle.
"Por eso estas en inteligencia, supongo, ¿Y bien? ¿Qué quieres?"
"Esa es la misma pregunta que tengo yo, porque, si te disparo ahora te llevaran inconsciente y es posible que tu medida disciplinaria se aplace hasta el martes, como tal perderás tu oportunidad de hablar con él sin la intervención de tus compañeros."
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SOY DEKU...? --- Arco 1
FanfictionBueno, en realidad es difícil describir esta historia en una oración o decir algo conciso sobre ella. Un Izuku con el conocimiento del Manga y muchísimo poder ya sea literal o adquisitivo tratará de hacer lo que haga falta por estabilizar ese mundo...