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Mundo paralelo

Final alternativo 1

[Las rosas están floreciendo en el planeta Isai, y el caballero lleva a su joven amante en su nave espacial privada para verlas].

(Alerta de primera fila: no es una visión del mundo principal, es un mundo paralelo, evítalo si no quieres verlo...)

-Las rosas están floreciendo en el planeta Isai, y el caballero lleva a su joven amante a verlas en su nave espacial privada.

Xu Yuan vislumbró la mano que sostenía. La mano grande, ligeramente tintada y huesuda se entrelazó con la suya, y sintió una alegría y una dulzura indescriptibles en su corazón.

Este era su esposo, al que había amado desde el instituto.

Un caballero tan maravilloso que trataba a los demás con tanta frialdad, y sin embargo estuvo con él la primera vez que se confesó.

Los ojos del señor eran un poco azules. Azul del mar profundo, y cautivador cuando lo miraba.

"¿Qué pasa cariño, qué tienes en mente?" Al notar el despiste del joven, Xie Shiyu preguntó preocupado.

Xu Yuan volvió en sí y sacudió suavemente las dos manos entrelazadas, inclinando la cabeza para mirar a su apuesto amante con las cejas arqueadas: "Nada, pensando en el señor".

Xie Shiyu no podía soportar que Xu Yuan lo mirara con esa sonrisa, como si el dulce azúcar de arce se derritiera en la punta de su corazón, con un sabor empalagoso y a la vez dulce que no se podía dejar escapar. No pudo resistirse a bajar la cabeza, besar los labios de su amante y comer un poco la punta de su lengua.

Xu Yuan dejó escapar un jadeo y frotó cariñosamente la punta de la nariz de Xie Shiyu. Después de soltar su boca, miró al hombre que frotaba su cuello como si su piel estuviera sedienta y soltó una carcajada.

"¿Por qué el señor está tan pegajoso como un perro grande?" Xu Yuan dijo eso a propósito. Porque sabía que no era sólo el señor, Xu Yuan era el más pegajoso en la relación. El señor había sido así antes, pero por alguna razón, una vez que se encontró con su mirada de querer estar cerca, esa mirada húmeda de perro, no pudo evitar acercarse a su esposo y estar cerca de él también.

Xie Shiyu se quedó atónito por un momento. Se había dado cuenta de que algo no iba bien en él. Desde que conoció a Xu Yuan, era como si hubiera estrenado varios trucos de amor, y no podía dejar de amarlo. Cuando miraba a Xu Yuan, siempre era dulce y tenía el corazón roto. Siempre tenía la ilusión de que si no agarraba a su amante con fuerza, se convertiría en humo. Sabía que era anormal, pero no quería cambiar.

Porque ama mucho a Xu Yuan. Y Xu Yuan también lo ama.

Era su primer aniversario de boda. Xie Shiyu pospuso su trabajo y convirtió el aniversario en una luna de miel, llevando a Xu Yuan a ver las rosas del planeta Issei.

Aparcaron la nave en el aparcamiento y tomaron un coche aerodeslizador para ir al hotel.

A través del escudo transparente, las estrellas brillaban más allá del planeta atmosférico de Issei, con nebulosas de color rosa y halos de varios colores que se extendían por el cielo estrellado.

Xu Yuan extendió la mano hacia el cielo y la agarró.

"He elegido una estrella para usted, señor".

El corazón de Xie Shiyu era demasiado blando para las palabras. Miró a Xu Yuan por un momento, sólo para ver que las mejillas del joven se sonrojaban maravillosamente antes de tomarlo por la cintura y sentarlo en un brazo. Tenía una voz tan elegante y magnética como la de un violonchelo: "Señor, lo llevaré a recoger más estrellas".