Insisto Jack, ¿Cómo puta madre me convenciste de esto?- Le pregunte a mi mejor amigo.
Jack Daniels, un muchacho moreno con una sonrisa extraña me miro. Aunque siempre teníamos nuestros encuentros de opiniones, éramos buenos amigos. Aunque claro, dada su naturaleza eran más contras los que me daban ser su amigo.
Muchas veces discutimos acerca de decisiones que él tomaba, y esta resultaba ser la vigésima sexta vez que discutíamos. El porqué del asunto, que el mismo lo diga.
Jack: No te quejes tanto Zack, este es un gran programa no te lo quieres perder por nada, no te arrepentirás lo prometo.
Por alguna razón, lo último que dijo no me dio la más mínima confianza. Pues teníamos ya bastantes años conociéndonos como para saber bien en lo que el otro pensaba, o al menos una idea de lo que pensaba.
Yo mire a mí alrededor, y la verdad no estaba para nada cómodo. Pues a nuestro alrededor no había más que hombres chiflando y sonando desesperados.
¡QUE YA EMPIECE ESTA MIERDA!
¡YA PAGAMOS LAS ENTRADAS, QUE COMIENCE EL SHOW!
¡QUE SALGAN YA!
Pero hubo unas voces que me sorprendieron en alto grado.
¡KYAAAAAAAAAAAAAAAAA! ¡QUE SALGAN YA NUESTRAS AMAS, QUEREMOS VERLAS EN ACCION!
¡POR FAVOR ESCOJANME A MI! ¡PUEDO COMPLACERLOS COMO NUNCA!
¡ELIGANME, PUEDO MANTENERLAS SI GUSTAN!
Zack: A donde coño fui a parar- Me pregunte, comenzando a sentirme nervioso.
Pues no era para nada normal lo que ellos mostraban, se estaban poniendo sumamente ansiosos y hasta lujuriosos, tuve que hacerme para adelante un poco más, pues el que estaba sentado atrás de mí se paró de golpe y se arrimó muy cerca de mi asiento, golpeándome sin quererlo con su entrepierna.
Zack: Al diablo yo me voy- Me dije.
Aproveche que Jack no veía, pues de lo contrario me habría detenido. Me levante en calma y comencé a caminar por en medio de los hombres y un par de mujeres desesperadas.
Pero como si el mundo estuviese en mi contra.
¡¿Están todos listooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo?!
El que parecía ser el anunciador del programa, un hombre bastante elegante y apetecible apareció en escena. Haciendo que el alborotado público, estallara en vítores y aplausos.
Esto complico mi plan, pues si de por sí ya era difícil el poder moverme en medio de tanta gente, ahora era casi imposible, pues todos se pusieron de pie cuando aparecieron las luces de neón, asumí que era porque el espectáculo iba a comenzar. Sea lo que fuere, yo no quería estar aquí ni un momento más.
Me importo poco el empujar a la gente, se comportaban como completos neandertales enardecidos. Me abrí paso hasta que pude estar en una escalera, misma por la que me dispuse a subir, de no haber sido por un brazo que me sujeto.
Cuando voltee chasque la lengua, allí estaba Jack mirando intrigado.
Jack: ¿A dónde piensas ir?- Me pregunto con suficiente fuerza- Todavía no comienza el show.
Zack: Me vale madres el show- Respondí- Me voy a casa.
Me solté y comencé a subir la escalera, pero no fue necesario voltear para notar como Jack venía detrás de mí. Lo cual me hizo hacer una mueca de molestia, en serio que a veces no soporto lo terco que es.