Cap 23 🖤❤️ (1/2)

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Deseaba tanto sentir sus labios y su cuerpo, pero no podía permitirle que se sintiera con derecho, por el simple hecho de estar casados.



No era esa la forma en que yo quería que fuera, no así, sin ningún sentimiento hacia mi.



Por mucho que lo amara y deseara, debía quererme más a mi mismo que a él y si no se daba cuenta del error que estába cometiendo conmigo, debía ser yo quien le corrigiera.


Sacando fuerzas de nose donde , le mordí el labio inferior y lo aproveche a mi favor, golpeando sus costillas para apartarlo definitivamente de mi.



_Como vuelvas a tratar de forzarme, la próxima vez.. te arrancare la lengua! _ un hilo de color rojo emanaba de su boca y el sabor de su sangre se mezclo con mi saliva _ no creas tener derecho sobre mi!.



Me levante de la cama, tome una de las almohadas y me fui al salón, pasaría la noche allí.


Eran tanta mi rabia, que ahogue mi llanto hundiendo mi rostro en la almohada!.


Me quedé tirado sobre el suelo de la habitación un buen rato, mi labio tenía un corte y mi orgullo de macho estaba herido.



En qué estaba pensando cuando le bese?.. Él era un hombre, era un matrimonio de contrato y yo... no le amaba, nada tenía sentido para mí, pero el deseo de besarle era mayor, incluso deseaba ir hasta el salón y besarlo una vez más.


Todo iba mal o peor que antes, lo había arruinado y está vez no sería fácil que Saint me perdonará.



Esa noche no pude dormir pensando en él, durmiendo lejos de mí.



Los días que siguieron no fueron mejores, Saint solo me hablaba en el trabajo y de trabajo, en casa ni siquiera comíamos en la misma mesa y de dormir juntos, nada.


Así cumplimos nuestro primer mes de casados.



_El pasaje a Tokio es el jueves de esta semana, la reserva del hotel, el alquiler del coche y el ticket de avión están imprimidos!



Debía viajar a Tokio por una semana, en la que estaría lejos de Saint, a él no parecía afectarle estar sin mi, es más, ya no era el mismo, sentía que poco a poco estaba alejándose de mi.


_Saint, espera un momento _ se detuvo frente a la puerta de mi despacho _ quisiera que esta noche.. cenaramos juntos en casa.. por favor!


_Ok!


Era toda respuesta, salía sin mirar atrás, pero al menos podría pedirle disculpas por mi comportamiento.


Le propuse ir de compras al supermercado y acepto.


Parecía tener buena disposición, quizás por el hecho de que estaría solo una semana.


Mientras comprábamos, quise entablar una conversación.


_Piensas quedarte solo en casa?

_Si.

_No preferirías invitar a tus amigos esa semana en qué no estaré?.

_No.

_Te parece si te ayudo a cocinar esta noche?

_Me da igual.

_Ya has dejado de quererme?


Se detuvo y no contesto, ni siquiera me miró, vio lo que tenía en frente y decidió llevar pollo.


Un Matrimonio Por Conveniencia Donde viven las historias. Descúbrelo ahora