Esta historia solo debe ser leída por gente con un fuerte estómago y que tenga algo en claro: todo lo que aquí se muestra es ficción y humor muy negro. No apruebo ninguna de las acciones que aquí se verán representadas, y no me hago responsable del...
Una distorsión en la realidad misma provocó que un portal se abriera en el interior de un departamento. Cual bizarro intruso, el Warlord que Ríe se apareció en aquel universo, con una gran sonrisa en su rostro.
—Dicen que El Que Todo lo Ve puede impedir que alguien extraño entre a estos universos —aseguró el risueño personaje—. El Que Todo lo Ve me la chupa bien chupada. Es más: me la escupe, me la chupa, me la lame, me la masturba y me hace acabarle en todos sus ojos de puto maricón.
El Warlord que Ríe empezó a caminar por el lugar, moviendo sus brazos de adelante hacia atrás de forma sumamente exagerada. Se dirigió al baño del lugar, y empezó a hurgar entre la ropa sucia del cesto. No tardó en sacar unas bragas con manchas de sangre, e inmediatamente empezó a olfatearlas.
—Ummm, esta en los días donde le chorrea sangre del bife —exclamó antes de meterse aquellas bragas en la boca—. Eso me prende. Verán, masturbadores de ojos abiertos, el tarado de Broken y el imbécil de Spidy pensaron que era buena idea que yo viniera a violar a la puta arrastrada de Lois Lane. Supongo que el indio mexicano ese permitió que yo cruzara y le dijo a El Que Todo lo Ve que, irónicamente, no me viera. ¿Quieren saber algo, pequeños pajeros subnormales? Creo que yo vengo en el momento justo. Piénsenlo, Spidy se basó en una relación que tuvo para hacer a la Lois Lane de Superman Renacimiento, y Broken sigue sin superar a la puta cajera que jugo con sus sentimientos, estúpido maricón él también. Se puede decir que el argentino de mierda que escribe lo que digo se esta desquitando, y el hecho de que al mexicano mamoncito le divirtiera que su Lois fuera torturada y violada por mí, demuestra lo que quiere que le pase a la chica que jugó con su corazón de bebito llorón. En resumen, los dos son unos malditos trastornados. La verdad, los dos son unos idiotas traga pitos del orto. Algún día iré a violarlos a ellos, y a todos ustedes también. Así que preparen el orto.
Interrumpiendo el monologo del grotesco ser, Lois Lane ingresó en su departamento. La mujer cerró la puerta y le pasó llave, la cual dejó en un pequeño mueble cercano junto a su bolso. Con un gesto de cansancio, se encaminó hacia el baño de su hogar, y al abrir la puerta se encontró al Warlord que Ríe.
—Hola —saludó el ser, alzando su mano e imitando la voz de Mickey Mousse—. Soy el Warlord que jajas, y vine a visitarte.
—¡¿Qué carajos eres tú y qué haces en mi casa?! —gritó la fémina, retrocediendo de la impresión.
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—Te acabo de decir que soy el Warlord que jajas —exclamó el ser, dando un paso hacia adelante—. Tendré que meterte la verga por las orejas para que escuches mejor.
—Aléjate —habló con tono amenazante la periodista, aunque no podía ocultar el temor en su voz—. ¿Sabes con quién estás hablando? ¿T-Tienes idea de quién soy?
—Lois Lane, periodista del Daily Planet, y la puta principal de este —aseguró el Warlord que Ríe, expandiendo su sonrisa de forma inhumana—. Hija del general Samuel Lane, quien se avergonzó cuando se enteró que se dejaba coger por cualquier joven soldado de las instalaciones, y que disfrutabas que te enfiestaran al mismo tiempo. Me pregunto cuántos pitos tuviste que chupar en este universo para llegar a donde estas. ¿Aquí también masturbabas a Perry White con las tetas por cada error ortográfico en tus notas? —preguntó mientras empezaba a avanzar hacia su víctima, la cual solo podía retroceder del temor.
