Jennie es hija del emperador de un gran pueblo de corea, en una visita a la feria con su prometido divisa una venta de extranjeros, en pocas palabras prisioneros, y es así en dónde en un acto de empatía compra a una muchacha maltratada pero encantad...
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"Recuerdo con emoción y nostalgia el día que empecé a vivir, por lo general, algunas personas empiezan a vivir en una camilla, con su madre al lado, mayormente en un hospital o en brazos de los doctores, pero no, yo empecé a vivir el día que conocí a ella, la luz que ilumino mis ojos vacíos, la que me hizo encontrar mi alma perdida, y la que mejoró mi futuro programado."
El momento exacto en el que empecé a vivir fue cuando la vi por primera vez, pero, les contare la historia unas horas antes de mi nacimiento.
Eran las 07:00 de la mañana, y yo estaba en un camerino con un par de mujeres que me estaban preparando para una reunión importante con los socios de mi padre, bueno, mas bien para quedarme parada viendo como mi padre habla con ellos, sin embargo faltar no era una opción, y tampoco lo era asistir con una mala presentación, después de todo, soy la hija de la persona mas importante del pueblo de corea.
Subestime demasiado esa reunión, veamos... ¿por donde empiezo? conocí al hijo de Junseo Lee, uno de los mas fieles colegas de mi padre, al parecer ellos querían que nos conociéramos para que seamos "buenos amigos".
Las mujeres me dejaron preciosa, una de ellas me dijo que la combinación de mis ojos cautivadores, mi sedoso cabello y el precioso vestido gris que escogí serian capaz de enamorar a cualquiera que me mirara a los ojos por poco mas de 3 segundos, ¿no seria eso muy deseado por todos? bueno, admito que yo no soy la excepción, sin embargo, no tengo porque desearlo, después de todo, fui nombrada la persona mas hermosa del pueblo a mis 14 años, y mantengo ese titulo incluso ahora, después de haber cumplido 24 años hace un par de meses.
Cuando llegue al comedor del jardín, todos quedaron cautivados con mi belleza, y no es que sea arrogante, pero es imposible que cargando un titulo tan honorable tenga baja autoestima. Antes de que pudiera saludar a los colegas de mi padre, la apariencia de un chico me dejo sin palabras... reconozco que al momento me dio mucha vergüenza hacer contacto visual por 00.02 segundos con el, pero tenia que ser educada y salir de mi nube -Buenas tardes con todos- dije con un tono pacifico, todos me saludaron y en eso, mi padre dijo -Llegaste a buena hora hija, el hijo del señor Lee y tu pueden ir a la feria en lo que nosotros hablamos de negocios, ¿verdad?- estaba apunto de decirle que si algo desanimada por sepárame del chico que vi recién, cuando en eso, "el chico" se para, se acerca a mi y me ofrece su mano para besarla en lo que me dice -Un gusto señorita Kim, soy Mako, el hijo del señor Lee- Los nervios se apoderaron de mi, pero no porque me sintiera atraída hacia el, bueno, un poco debido a que su aspecto físico era muy lindo, sin embargo la razón principal de mis nervios era la emoción de conocer a alguien de mi edad, pues, mi padre nunca había permitido que me relacione con otras personas, por ejemplo, algo tan básico como ir a la escuela estaba prohibido para mi, por lo que recibía clases privadas de tutores especiales, en mi infancia solo tuve 2 amigos, los cuales se mudaron en mi cumpleaños numero 8, pero, no debo perder esta oportunidad, debo causar una buena impresión.
-El gusto es mío. Padre, seria un honor ir a la feria con Mako- mi padre hizo una seña con la cabeza indicando que era el momento adecuado para nosotros irnos, y así fue, en lo que llegábamos a la feria Mako y yo estuvimos hablando, me cayó muy bien y resultamos tener muchas cosas en común, una de ellas y nuestra coincidencia que mas valoré fue que los dos somos "anti sistema" a los dos nos parece que la mayoría de reglas de este pueblo son innecesarias, y algo absurdas. Justo cuando íbamos a empezar un nuevo tema de conversación, parece que el tiempo se adelanto y llegamos a la feria, antes de que Mako pudiera decir algo yo ya estaba corriendo hacia un puesto de manzanas acarameladas, nunca tuve muchas oportunidades de comer comidas callejeras, quería probar cosas nuevas.
Mako se acerco a mi y me preguntó -¿quieres una manzana acaramelada?- le dije que si, y el me compro 2 manzanas, una cubierta de caramelo y otra cubierta de chocolate, mientras yo me comía una el me ayudaba a cargar la otra, justo en "ese momento" fue cuando vi una "tienda" que básicamente vendía prisioneros extranjeros, quede tan atónita, se que la venta de personas estaba extremadamente normalizada en mi pueblo, sin embargo me parecía un acto INHUMANO, Mako noto la tristeza en mis ojos -no tienes que decir nada para saber lo que estas pensando, yo opino lo mismo que tu..- me dijo, enseguida me acerque a ellos, le pregunte al vendedor cuales eran sus historias, el me conto las historias de todos "enemigos del estado, parientes de asesinos de nuestros ancestros, intentó robarnos, falto el respeto a nuestros guardias..." todas sus historias parecían estar justificadas, excepto una, y cuando le pregunte al vendedor sobre ella , me dijo "la verdad, lo único que se de ella es que se llama Lisa".
