Llevábamos 2 meses saliendo y yo estaba completamente enamorado de ella. Recuerdo nuestra primera discusión, fue la más graciosa del mundo porque fue una estupidez y la arreglamos muy bien, a punta de besos. Esos besos que ganan guerras a su favor.
2 MESES ANTES.
-Llegué ensombrerado- dijo entrando a la barra.
-Mi niña- ella sonrió- ¿Qué haces acá?
-Vine a trabajar- empezó a vestirse- el trabajo estuvo pesado.
-Hoy no te contrato- ella me vió ofendida- estás cansadísima.
-¿Cansada yo?-
-Se te ve en los ojitos- acaricié su rostro- no te contrato hoy.
-Ay Juan Pablo no seas fastidioso y ya me voy a trabajar-
-Que no Lucía, hoy ve a tu casa a descansar-
-Que no, que yo trabajo- se giró enojada y se fue a atender las mesas.
-Dios santo- fuí detrás de ella- Lucía, ve a descansar.
-No-
-Lucia- dije molesto.
-No me puedes decir que hacer- me dijo molesta.
-Es mi negocio y en mi negocio mando yo-
-¿Por qué eres tan testarudo?-
-¿Por qué eres tan terca?- giró los ojos y se fue hacía la barra.
Atendí un par de mesas y volví a la barra. Ella estaba ahí sentada, en su mesa cruzando los brazos y enojada. Muy enojada.
-¿Qué quieres tomar?-
-Sapo- reí hacía abajo.
-Soy un mesero, debo preguntar- ella dirigió su mirada a mí- ¿Por qué no fuiste a descansar?
-No se me dió la gana- me senté a su lado- ¿Por qué no me dejaste?
-Estás muy cansadita, mira tus ojitos- tenía ojeras, los ojos chiquitos y ligeramente rojos.
-Estoy bien- se acercó a mí y me besó- ¿Me dejas?
-No- dije sobre su rostro y volvió a besarme.
-¿Me dejas?- reí.
-De pronto- volvió a besarme- Pero sólo un rato- se levantó con una sonrisa a atender las mesas.
Estuvo muy pesado, sabía que estaba cansadísima y no lo iba a aceptar.
-Gracias jefa- ella me abrazó por el cuello- ahora vamos a descansar.
-Ay que aburrido- reí y ella me dió un besito- ¿Y sí vamos a tu apartamento?
-¿A qué?-
-Pues a dormir- dijo sonriendo.
La besé. Ella me siguió el beso y la temperatura empezó a subir.
Su mano empezó a bajar por mi espalda.-Vamos a mi apartamento- ella asintió rápidamente.
Gasté el mismo tiempo de siempre llegando a mi casa, pero se sintió una eternidad.
-¿Y villa?- entramos a mi habitación en medio de besos.
-Ese no se despierta- cerré la puerta a mi espalda.
Hicimos el amor y estuvo tan bien, lleno de deseo, ganas y, aunque suene redundante, de amor.
Ver su cuerpo desnudo y acariciarlo fue un sueño, uno que se me hizo realidad.-Isaza, ¿Anoche trajo…?- Lucía y yo nos sentamos de golpe- Uy, perdón- villa cerró rápidamente- avisen que van a salar la casa.
-¿Por qué entra sin avisar?- ella reía.
-Voy por pan- Dijo villa entre risas y se fue.
-Buenos días- ella se acercó a mí y me abrazó- mi ensombrerado bello.
-Buenos días mi niña preciosa- besé su frente- ¿Cómo dormiste?
-Más rico- reí- para esto si no me dijiste "istis cinsidisimi"
-Usted inició- ella rió- duerme otro rato- acomodé su cabello detrás de su oreja.
-Pero si duermes conmigo- me sonrió- me duele la espalda.
-Te dije que descansaras y no trabajaras más-
-¿Vamos a pelear otra vez?- ella sonrió- yo ya gané la guerra.
-A punta de besos. Eso es trampa- ella rió- venga pa' acá- la abracé y ella quedó sobre mí- ¿Qué quieres hacer hoy?
-Vi que hay una serie- se estiró y buscó el control- no es nueva, pero…- levantó sus hombros.
Puso una serie de niños coreanos haciendo su primer mandado.
-Ay no- ella me miró- Mira esa cosita, Dios- reí- tan lindo, no puedo con ese mocoso.
-¿Quieres tener hijos?-
-¿Me va a hacer uno?- reí- creo que eso es un futuro muy incierto- se acostó sobre mi pecho- no se sabe qué pueda pasar mañana, o la otra semana. ¿Qué tal ya esté embarazada?- reí- es broma, yo planifico.
-Y usamos condón- ella asintió.
-Esta semana voy a estar ocupada- asentí- no creo que podamos vernos mucho.
-Te llevo siempre en mi memoria- ella sonrió- sólo contéstame los mensajes.
-Lo intentaré-
-Isaza- Villa entró de nuevo- carajo, vistanse.
-Fastidioso- dijo Lucía acurrucandose hacía mí.
-¿Qué quiere?- la abracé.
-Voy a pedir algo para almorzar ¿Qué quieren?-
-Pida lo que quiera- le respondí.
-Pero sushi no- replicó Lucía
-Piri sishi ni- él salió.
Después de almorzar, ella tenía que irse.
-¿Cuándo te veo de nuevo?- la abracé.
-En 8 días, voy a estar ocupada-
-Te voy a extrañar- sonrió y dejó un pequeño beso sobre mí boca.
-Te voy a extrañar más- le sonreí- intenta sobrevivir sin mí.
-Imposible- ella rió y salió- Chao mi niña.
-Chao ensombrerado- se fue.
-¿Ustedes qué?- Villa estaba sentado en la sala- ¿Se cuadraron ya?
-No- reí nervioso- es muy rápido.
-Rápido- dijo riendo- pídale, no sea idiota- le dí un ligero puño- Sofía y yo ya estamos saliendo.
-No sea descarado- me vió confundido- ¿Me está diciendo en mi cara que me va a poner los cachos?
-Idiota- dijo riendo- haga de comer.
-Como ordene-
La serie de niños coreanos que hacen mandados es 20/10. Se llama mi primer mandado. Full recomendada.