𝙱𝚕𝚘𝚘𝚍 𝙽𝚒𝚐𝚑𝚝𝚜 |𝙺𝚊𝚗𝚊𝚖𝚎 𝙺𝚞𝚛𝚊𝚗|

𝕮𝖆𝖕í𝖙𝖚𝖑𝖔 𝖓𝖚𝖊𝖛𝖊

𝙾𝚏𝚏𝚎𝚛𝚒𝚗𝚐 𝚘𝚏 𝙱𝚕𝚘𝚘𝚍.

Al día siguiente en clase, ni Yagari ni Zero se presentaron. Kagome sabía dónde estaba Zero, podía sentirlo en la casa de huéspedes del presidente. Pero Yuuki no sabía eso, así que durante la patrulla nocturna, Yuuki confrontó a Yagari sobre la ubicación de Zero.

Descubrió que estaba aislado en la habitación de invitados del presidente. Sin perder un minuto, corrió a buscar a Zero. Kagome había sentido cuando se fue y la siguió. La sensación de que Yuuki quería darle a Zero su sangre se estaba volviendo más fuerte. Yuuki esperaba que lo ayudara, pero a la larga solo lo lastimaría más.

Kagome llegó justo cuando Yuuki agarró a Zero para ir al baño. Sabiendo lo que iba a hacer, abrió la puerta y se metió en la ducha. Los ojos de Zero comenzaban a mostrar signos de color rojo, y Yuuki se estaba quitando la camisa exterior. Agarrando su hombro, Kagome detuvo a Yuuki antes de que pudiera continuar. Sobresaltado, Yuuki se giró para mirar a Kagome con ojos muy abiertos y culpables.

"Yuuki, tienes buenas intenciones, pero no debes darle tu sangre".

"¿Por qué no? No quiero que caiga a un Nivel E. Si mi sangre lo ayuda, con mucho gusto también se la daré".

"Como dije, tienes buenas intenciones. Sin embargo, si le das tu sangre ahora, puede retrasarlo".

"¿Qué quieres decir?"

Mirando a Zero, que respiraba con dificultad, Kagome le envió una ola tranquilizadora y el rojo de sus ojos desapareció por completo. Se dio la vuelta para quedar frente a los dos.

"He hecho unas pastillas con mis poderes purificadores para Zero. Lentamente destruirán toda la sangre de vampiro en su cuerpo. Y en poco menos de un mes, volverá a ser humano".

Yuuki jadeó cuando Kagome dijo eso, pero continuó escuchándola. "Pero le dije que tenía que tener cuidado. Si bebiera tu sangre ahora, posiblemente podría regresar al principio. No quieres eso, ¿verdad, Yuuki?"

"No, quiero que Zero vuelva a ser humano. Para que ya no se odie a sí mismo".

Kagome sonrió y señaló la ropa de Yuuki, "Deberías volver a ponértela. Y me vendría bien tu ayuda. Cada vez que veas que Zero puede necesitar sangre, somételo o ven a buscarme si hay tiempo. Mis poderes pueden calmarlo, y romper la necesidad de sangre. Pero no debes, bajo ninguna circunstancia, ofrecerle sangre, ¿entendido?"

"¡S-sí!"

"Bien, ahora creo que es hora de ir a la cama. ¿No es así? Zero, puedes regresar a tu dormitorio ahora, y nosotros nos dirigiremos al nuestro".