𝙱𝚕𝚘𝚘𝚍 𝙽𝚒𝚐𝚑𝚝𝚜 |𝙺𝚊𝚗𝚊𝚖𝚎 𝙺𝚞𝚛𝚊𝚗|

𝕮𝖆𝖕í𝖙𝖚𝖑𝖔 𝖉𝖎𝖊𝖟

𝚅𝚒𝚜𝚒𝚝𝚘𝚛 𝚝𝚘 𝚝𝚑𝚎 𝙰𝚌𝚊𝚍𝚎𝚖𝚢.

Al día siguiente, Kaname pasó el tiempo encerrado en su habitación. Los otros vampiros comenzaban a preocuparse. Takuma trató de preguntarle qué le pasaba, pero no recibió respuesta. Los otros vampiros lo dejaron en paz. Estaban seguros de que solo estaba cansado o posiblemente pensando en algo.

Al final resultó que, era ambos. Había estado pensando tanto en Yuuki como en Kagome cuando se quedó dormido en su sofá. Se despertó al escuchar que el abuelo de Takuma llegaría esta noche. Si Asato Ichijou venía a la Academia, era justo que Kaname lo saludara.

Llegó la noche y todos los estudiantes vampiros disponibles se reunieron para saludar a Ichijou-sama. La puerta se abrió y caminó hacia la entrada. Donde Kaname lo saludó, y él le devolvió el saludo. Conversaron un poco antes de que Takuma atrajera la atención de Kaname hacia sí mismo, lo que provocó que Kaname le mostrara el cuello a Asato. Haciéndolo querer beber la sangre de Kaname. La escena que siguió fue cualquier cosa menos agradable.

Asato agarró la mano de Kaname, dando la impresión de que iba a beber de él. Aidou y Ruka lo detuvieron antes de que algo pudiera pasar. Aidou comenzó a gritarle a Asato por intentar beber la sangre de Kaname. Pero fue demasiado lejos y Kaname lo golpeó en la cara. Kaname se disculpó por el comportamiento de Aidou. Y Asato se inclinó ante Kaname.

Un golpe llegó a la puerta antes de que nada pudiera ir más lejos. Se abrió para mostrar a Yuuki de pie allí con Kagome a su lado y apoyada contra la pared con los brazos cruzados. Zero no estaba por ningún lado.

Yuuki se inclinó ante Kaname y Asato y dijo: "Buenas noches, Kaname-senpai, Ichijou-sama". Se enderezó y continuó: "Estamos aquí para llevarlos a conocer al presidente Kaien Cross".

Asato miró desinteresadamente a Yuuki, pero cuando sus ojos se encontraron con unos familiares azules y plateados, tuvo que volver a mirar. ¡No podría ser! No había visto ojos como esos desde Kiyoshi Ketsueki, y había muerto hacía varios años. Caminando hacia ella, como en trance. Asato se acercó a Kagome. Ella se enderezó y lo miró, haciendo que dejara de moverse.

Tenía que saberlo, esos ojos le eran tan familiares. Se parecían a los de Kiyoshi, ya los de su padre antes que a él. Pero ella era humana. Sin embargo, tenía que preguntar. Los otros vampiros en la habitación estaban confundidos por su comportamiento, incluido Kaname. Seguro que la sangre de Kagome olía delicioso, pero no valía la pena distraerse por eso.

"Tú", dijo Asato, mirando a Kagome, "¿cómo se llama tu padre?" dijo con su voz de mando.

Kagome entrecerró aún más los ojos y respondió con frialdad: "No es por faltar el respeto, señor , pero quién era mi padre no es de su incumbencia. No vinimos aquí para hablar sobre mi familia. Así que si nos sigue, lo tomaremos". usted al presidente".

Se dio la vuelta y comenzó a caminar de regreso. Pero él la detuvo en seco cuando le hizo la siguiente pregunta.

"¿Obtuviste tus ojos de tu padre?"

Los susurros comenzaron, ya ella no le gustó. No tenían ninguna razón para hablar de su padre de ninguna manera o forma. La habitación descendió unos grados cuando sus pensamientos se volvieron más violentos. Refrenó sus poderes y dijo tan tranquilamente como pudo: "Ya he dicho que mi familia no es de tu incumbencia. Entonces, si lo dejas así", dijo mirándolo por encima del hombro, "eso sería apreciado enormemente." Sin esperar a ver si lo seguía, Kagome se fue. Tenía que escapar antes de que sus poderes se volvieran locos.

"Ojii-sama, ¿qué fue eso?" preguntó Takuma después de que Kagome se fuera.

"Nada", dijo. Volviéndose hacia Kaname, le deseó buenas noches y siguió a Yuuki a la oficina del presidente.

Takuma miró con curiosidad a Kaname en busca de una respuesta, pero no recibió ninguna mientras Kaname subía las escaleras hacia su habitación. Tenía algunas investigaciones que hacer. Y más pensando.

Pasó una semana y media, y Kagome se había calmado del incidente sobre su padre. Sabía que había cometido un error, él había reconocido sus ojos. Y buscaría para averiguar por qué los tenía. Especialmente porque ella era humana y su padre estaba muerto. Los vampiros tenían mucha curiosidad acerca de su herencia, pero no se atrevían a preguntarle al respecto. Sabían que ella podía matarlos con sus poderes y no deseaban lidiar con eso.

Zero estaba progresando bien y su sed de sangre se había detenido casi por completo. Todavía tenía los impulsos, pero podía mantenerlos a raya fácilmente. Solo pasaría otra semana y media antes de que sus cambios estuvieran completos. Pero de alguna manera Kagome sabía que no sería tan fácil. Tenía la sensación de que alguien venía, alguien que no era bueno. Pero ella no podía pensar en eso en este momento. Estaba ayudando a mantener a las niñas alejadas de las puertas.

Se acercaba un baile y las chicas estaban demasiado emocionadas por bailar con la Clase Nocturna. Incluso si Kagome quisiera intentarlo, no estaba de humor para darles otra charla a las chicas. Y ya se habían olvidado del que les regalaron el día de los enamorados.

Tan pronto como se abrió la puerta y la Clase Nocturna salió, las chicas comenzaron a empujar incesantemente. No se atrevieron a pasar más allá de Zero, pero estaban haciendo todo lo posible para pasar por encima de Yuuki. Kagome tampoco los dejó pasar. Todo lo que tenía que hacer era mirarlos y volvían a ponerse en fila, pareciendo un niño que había robado una galleta del tarro de galletas. Ni siquiera tuvo que darles su mirada de "Sesshomaru", en la que, eso sí, era bastante buena.

El grupo de chicas estaba presionando lo suficiente a Yuuki, que la empujaron hasta la puerta del salón de clases. Una vez allí, Hanabusa empujó a Yuuki adentro. Kagome estaba parada allí parpadeando. Ella estaba tratando de averiguar qué pasó. Después de darse cuenta de que Yuuki había sido "secuestrada" por la Clase Nocturna, caminó hacia allí, abrió la puerta y la arrastró fuera. Ignorando por completo las miradas que los otros estudiantes le estaban dando. No eran tan importantes de todos modos.

Yuuki y Kagome estaban de pie frente al presidente, discutiendo sobre el nuevo estudiante transferido. Se suponía que Yuuki le mostraría los alrededores, y Kagome tomaría las patrullas de Yuuki. A Kagome no le gustó la sensación que tuvo cuando se enteró del estudiante transferido. Tuvo un presentimiento cuando escuchó que estaba comenzando en Cross Academy; ¡Kagome ni siquiera sabía quién era la chica!

Sus sentimientos se confirmaron cuando la chica joven entró en la habitación. Inmediatamente se dio cuenta de que la persona que estaba frente a ellos no estaba en el cuerpo correcto. Y prácticamente podía ver la conexión que tenía con Zero. Una conexión que Kagome planeaba severa. Pero tenía que tener cuidado, tenerla aquí podría hacer que Zero volviera al nivel que tenía antes de que ella le diera las pastillas. Sí, Kagome tenía que proceder con precaución.

También te mostraré un dulce sueño... la próxima noche...