➤𝐆𝐔𝐄𝐑𝐑𝐀 𝐃𝐄 𝐑𝐎𝐋𝐄𝐒 {Volkov x Tú x Gringo} [TERMINADA]

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POV's Mia Hopkins.

Estaba paseando por ahí, el garaje central era la misma mierda de siempre, pero te podías divertir con las estupideces de alguien más y ya no sólo con las de Yun Kalahari.

La mafia había quedado en cinco minutos y yo ya estaba lista para lo que se viniera encima, haríamos ahora sí un plan para poder eliminar a los hijos de puta de los Verdecitos.

Armando había descubierto un punto débil del líder de Los Verdes, y ese punto débil era la esposa del subinspector más fastidioso de todos, eran dos pájaros de un mismo tiro y me encantaba.

Me monté en mi Bugatti negro y comencé a conducir hasta la sede, llegué justo a tiempo.

- ¡Muy buenas compañeros!

- ¿Las mejores noticias jefa?

- Por supuesto que sí, mi querido Cebralin. Nadando, ¿puedes decirlo tú?

- El día de ayer investigue un poco, y seguí al líder de Los Verdes... Me topé con la mujer de el subinspector Brown.

- ¡El que me toca los huevos en el mecánico! Me va a encantar darle esa advertencia. - Dijo Manolo, quien estaba cabreado con ese policía.

- Si... El caso es que: Su esposa le es infiel a Brown, y al parecer esta embarazada de uno de los dos o quien sabe... A lo mejor hay un tercero. - Dijo Nadando y luego lo interrumpieron de nuevo.

- ¡Le diré que yo me la tire! - Dijo Manolo de manera victoriosa.

- No queremos cantar a la policía Evo, más control.

- Calmante Manolo. - Dijo Xiaomi, tocándole los "Evos".

- Sí, calmate... - Siguió Culebra.

- Ya cállense. - Regañó Diablo.

- Nunca te divielte' Diabolo, pol eso no te quiele la jefa. - Dijo Xiaomi, sacándole la lengua a Diablo.

- No estamos aquí para discutir cómo niños pequeños y tampoco regañar como superiores. Aquí todos somos igualitarios. - Dije molesta, porque no dejaban continuar a Nadando. - Continúa.

- Bueno... Creemos que podríamos secuestrarla, dar en el punto débil de Moco y que toda la mafia se debilite ante nosotros.

- Me gusta la idea.

Un móvil empezo a sonar.

- ¿Quién carajos tiene un móvil en una junta?

- ¡Yo! - Dije y conteste.

- Atenea. - La voz de John Walker/ Gringo.

- Gringo, ¿porque no te has presentado?

- Los Verdes. - Escuché cómo por el otro lado de la línea hubo un golpe y un gemido de dolor, esto pintaba malísimo.

- Rastreen, rápido. - Susurre a mis compañeros, Juanjo empezó el rastreo de la IP de donde llamaban.

- Dos minutos mas, distráelo. - Dijo preocupado.

- Verdecito supremo... Quiero imaginar.

- Y estas en todo lo correcto.

- ¿Porqué razón estas con mi compañero?

- Quizá porque esta secuestrado. Que pregunta más estúpida.

- Que amable...

- Mataste a dos de mis hombres, que quieres que te diga.

- Y los que me faltan...

- No lo creo Atenea, tengo a tu noviecito, y no creo que quieras que le pase algo malo.

- ¿Qué quieres Moco?

- Que se entreguen tus compañeros o John lo pagará.

- Eso es prácticamente imposible.

- ¡Tengo la IP!

- Vayan, maten a quien se les crucé, los alcanzaré en cuanto acabe la llamada.

- Tú lo pediste, chicos disparen.

- ¡Alto! Ya están de camino.

- Ni te he mandado la ubicación.

- Sabes... Fui comisaria en la policía, y aún tengo cierto poder ahí... Así que van los GEO's por ustedes incluyéndome a mí, querido.

Solo escuche como se colgaba la llamada, se la había comido toda.

Al rato escuche cómo llegaban mis chicos, salí de inmediato, John estaba inconsciente y los demás estaban intactos.

- Cuando llegamos no había nadie. - Mencionó Nadando.

- Les dije que la policía estaba de mi lado. Dejen a John en la camilla, ya llamé a tu amiga Yun.

- Esta bien.

- Yun, ¿podemos hablar? - Pregunté.

- Claro. - Dijo.

Nos fuimos a la orilla del mar, donde estaba el submarino en construcción.

- Dígame jefa.

- Pasa que... Ya no sólo habrá un jefe en esta mafia.

- ¿De qué habla? - Preguntó confuso.

- Necesito quien me sustituya cuando me vaya, y he elegido que seas tú, si elegía a Armando, al final él los echaba a todos. - Reímos.

- Tú, Xiaomi, tienes una mente impresionante, por más que se te salgan los nombres... Haces bien tu trabajo y sabes lidiar con situaciones de riesgo y liderar cuando yo no estoy, eres la mejor opción.Bienvenido, Jefazo.

- ¡NO PUEDE SEL! ¡SOY EL ASIATICO MA' FELI' DEL MUNDO!

- Felicidades, compañero jefazo, ve a presumir a Gringo, aunque este moribundo.

- Con gusto.

(....)

Después de unos días Gringo había recuperado la conciencia, aunque yo no había estado precisamente cuidando de él, estaba ocupada... Matando a la idiota de la novia de Brown y mandando la noticia a los medios de comunicación y a la policía., para que esta fuera por ellos mientras estaban de luto, así como lo haríamos nosotros.

Solo faltaba esperar el día donde por fin elimine a su líder.... Y para eso faltaba relativamente nada.