MIRAI [Soukoku]

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Angeles enviados al plano terrenal con una sola misión. Proteger a la humanidad.

Pocos son quienes saben de su existencia, celebran en silencio sus victorias mientras el mundo goza de la paz obtenida por ellos.

Su habilidad es única, lograda con lo que muchos consideran un milagro, y otros, un eslabón importante en la cadena de evolución del ser humano.

Viajar en el tiempo.

Algo que parece imposible pero que ellos de algún modo lograron conseguir.

—Tenemos entre nosotros a dos tipos de viajeros, y hay que saber diferenciarlos para saber que tipo de misiones pueden desempeñar —los recién reclutados escuchaban con atención al hombre que daba la clase, algunos suspiros se hacían presentes en el lugar acompañándose del sonido de los bolígrafos chocando con el papel—. El viajero orgánico es aquél que ha nacido con la capacidad de transportar su conciencia a cualquier época dónde estuvo o estará, desde los inicios de los tiempos estos viajeros han existido, dándonos a nosotros como organización la capacidad de preveer catástrofes  por el bien de la humanidad... Sus mentes son resistentes, son capaces de retener memorias de futuros que han evitado y que otras personas no son capaces de procesar por qué no lo vivieron; anoten bien, el hecho de que sean capaces de transportar sus conciencias a sus cuerpos en épocas pasadas y futuras no los hace inmortales, en algún momento su energía se transformará en alguna otra cosa, es agotador vivir tantas vidas, ¿No lo creen? Actualmente es un poco difícil encontrar viajeros orgánicos, lo que nos lleva al segundo tipo de viajero, ¿Alguien que haya leído el artículo que les encargue y que me pueda dar una respuesta? —un pelinaranjo entre todos sus compañeros extendió el brazo, ante la falta de respuesta el anciano asintió en su dirección siendo que sería el único que había leído—. Adelante Nakahara-kun.

—El viajero artificial es aquél que nuestra organización ha creado para resolver la escasez de viajeros orgánicos. A diferencia del viajero orgánico, un viajero artificial solo puede viajar lo que durará su vida, no suelen tener misiones de gran relevancia a no ser que algún suceso importante suceda en lo que durarán sus vidas y se requieran como apoyo para un viajero orgánico.

—Es una buena descripción, bien hecho Nakahara-kun —el chico sonreía con suficiencia, mientras detrás de él un castaño levantaba la mano también—. No esperaba contar con su participación Dazai-kun, ¿Tiene algo que aportar al comentario de su compañero?

—Por supuesto, mi compañero ha hecho referencia a los viajeros artificiales como si no fuéramos más que herramientas desechables, pero en ocasiones como característica común solemos tener un sentido más agudizado para detectar catástrofes, algunos poseemos un intelecto superior al viajero orgánico lo que nos vuelve en excelentes estrategas, por eso somos “apoyo” ya que nos encargamos de hacer los planes para evitar enredar tanto los eventos, de manera que posiblemente terminemos creando alguna situación paradojal y como consecuente: destruyendo más vidas. Es por ello que hasta antes de la creación de nuestra organización muchos eventos fueron inevitables, tantas guerras... Tantas pestes... Es importante recalcar que ambos tipos de viajeros somos escenciales para mantener el equilibrio de nuestro delicado plano temporal, y por eso nuestra organización nos concentra a todos en esta sede.

—Excelente Dazai-kun, es importante reconocer la importancia de ambos tipos de viajeros.

El pelirrojo volteaba a ver a su compañero con una clara expresión molesta en el rostro mientras esté le mostraba la lengua. Ese mocoso ya lo tenía harto, si era sincero. Cada que él hacía cualquier comentario en clase Dazai era incapaz de contener su lengua y decía cualquier mierda que desacreditaba su opinión. Tenía que esforzarse más y seguir leyendo para que él no le sacará la delantera, desafortunadamente para él, Dazai poseía un alto intelecto desde que era un niño. Ventaja injusta creía él pues Dazai era un viajero creado de forma artificial, obviamente sería un prodigio, era necesario para que fuera útil para la organización.

—Ya que eres un viajero creado de forma artificial siempre me pregunté si eras un androide o algo parecido.

Un grupo mantenía acorralado al castaño, Chuuya miraba desde el fondo como molestaban a su rival.

El de anteojos sacó una filosa navaja de afeitar de su bolsillo, mientras dos del grupo sostenían al chico y le levantaban las mangas del uniforme Dazai miraba a Chuuya, “¿Esto fue tú idea?” eso decía su mirada, Chuuya detestaba a Dazai por como lo trataba en las clases, si, pero no había sido el autor intelectual de dicha mierda, solo había sido arrastrado al baño por el resto de sus compañeros. Desvió la mirada con pena, no pudo soportar la mirada del castaño sobre la suya.

Los gritos de dolor no se hicieron esperar... El pelirrojo se tenso y su respiración se aceleró, en cuanto tuvo el valor de levantar nuevamente la mirada encontró con que su compañero estaba destrozando el brazo de Dazai con la navaja, salía demasiada sangre de aquellos cortes en una espiral bizarra que recorrían desde su codo hasta su muñeca, su compañero metió las uñas escarbando en los cortes, haciendo gritar más a Dazai.

—¡Ya déjenlo! Deja está mierda idiota, lo estás lastimando.

—¡¿Ah?! Si antes no hiciste nada por detenernos, ¿Ahora quieres hacerte el héroe?

—Madura imbécil, esto es la vida real, no ninguna película de ciencia ficción, le destrozaste el maldito brazo, lárgate ya o te destrozo la cara a golpes —la tensión se incrementaba cada vez más entre ambos, hasta que el de anteojos se rindió y ordenó a su grupo dejar el baño—. ¿Estás bien?

En el momento que Chuuya se acercó a verlo Dazai lo empujó con su brazo sano, mordía su labio para contener sus sollozos mientras las lágrimas salían descontroladas de sus ojos café.

—Dejame en paz.

Chuuya salió del baño, a prisa, en el pasillo estaba su profesor, el anciano caminaba con calma.

—Hirotsu-san, Dazai está herido, es... Es mi culpa y de otros compañeros. Ellos huyeron, pero Dazai le dirá todo, está en el baño, por favor ayudelo.

El anciano camino rápido hacia el baño, mientras Chuuya comenzaba a morderse las uñas con ansiedad, esperando por su castigo.