BAD LUCK (Hyunghyuk adaptación)

LI

—¡Son Jooheon!

El grito de Hyunwoo hizo que el híbrido se sobresaltara, el humano abrió de golpe la puerta del cuarto y el tigre apretó la pelota que tenía entre sus manos, clavando sus garras y pinchándola.

El mayor se detuvo a unos pasos de él, estaba rojo de furia, resopló para calmarse, no le gustaba gritarle a sus híbridos, acomodó el celular un poco más lejos de su rostro.

— Acá me está diciendo Hyungwon que le diste una de mis pastillas mágicas a Minhyu.

— ¿Hyunwoo que mierda? ¿"Pastillas mágicas"? ¿Lo tratara de idiota? ¿Son tuyas? ¿Qué mierda haces con viagra?

— Hyungwon, cállate— Hyunwoo sonó avergonzado, volvió su vista hacia el tigre—. Jooheon, estás castigado.

— ¿Por qué siempre me castigas? — Honey hizo un puchero, apretó más la pelota entre sus manos, sacando aún más aire de esta.

— Porque me das razones para hacerlo, Jooheon— el tono de Hyunwoo sonó tranquilo—. Ahora, estoy con Hyungwon en altavoz para que escuche, junto conmigo, por qué lo hiciste.

El humano se acomodó frente a él, agachado, con el celular entre ambos.

— Quería ayudar a Minhyuk— murmuró—. Y así salvamos a Hyungwon.

— ¿Salvarlo de qué?

— De la mala suerte.

Se escuchó el suspiro de Hyungwon y de Hyunwoo.

— Honey, la mala suerte no existe. La buena tampoco— dijo Hyunwoo—. La suerte no es real, Honey.

El tigre frunció el ceño.

— Así que olvida de la mala suerte y del martes trece y de los gatos negros y todo eso, no es real— finalizó el humano, hablando con suavidad—. ¿Está bien?

Jooheon asintió sin ganas.

— Y no tienes que sacarme esas pastillas, Tigre, son peligrosas, no puedes jugar con ellas ni dárselas a nadie, ¿Bien?

Jooheon asintió de nuevo.

— Bien, Jooheon, no tendrás televisión en toda la semana, disfruta de tu castigo— y se fue antes de que el híbrido pudiera replicar, cerrando la puerta del cuarto, mientras se ponía el teléfono junto a su oreja, sacando el altavoz—. Bien, Hyungwonie, lo siento, no volverá a pasar.

— Bien, sí, sí... Pero, responde, ¿Porqué tienes viagra?

Hyunwoo hizo una larga pausa, incómodo, sintió sus mejillas ruborizarse.

— Bien, Hyungwon, esto es incómodo de hablar... — murmuró—. Ehhh... ¿Sabes quién se encarga de congeniar con Jooheon y con Hoseok, no?

— Quiero creer que tú— respondió el castaño con una risa.

— Exacto, ahora, ¿Conoces el dicho de que "Se reproducen como conejos"? — Hyunwoo escuchó la sonora carcajada de Hyungwon— ¡Chae Hyungwon!

— Sí, sí, sí... Continúa, es que es muy-— y volvió a reír.

— Básicamente, soy uno sólo para esos dos y cuando Hoseok tiene ganas... En serio tiene muchas ganas y a veces estoy muy cansado y no funciona la palanca.

Hyungwon reía a más no poder, y Hyunwoo pensó en cortarle, fueron varios minutos en los que el castaño no daba más de la risa.

— Hyunwoo necesita ayuda con su palanca con pastillas mágicas— se burló.

— Te odio, Chae— masculló, había esperado por si necesitaba algo y sólo había recibido esa estúpida frase.

Colgó y quiso tirar el celular lejos, pero lo guardó en su bolsillo con fastidio.