estoy conciente

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Tal vez sea mi nerviosismo o tal vez sea que por primera vez vi una mirada un poco mas seria en el rostro del viejo, pero sentía que lo que decía era realmente en serio.

Metiendo las manos en mis bolsillos toque los numerosos huesos y colmillos que tenia para empezar a formar un hechizo mientras me enfocaba en los huesos que necesitaba.

Lucius-liberar espíritu ¨cierra los ojos para concentrarse¨

Dejando que toda mi magia fluya de mi cuerpo varias distorsiones mágicas se formaron a mi alrededor en sucesión.

De las distorsiones se empezaron a formar un grupo de diez espíritus diferentes.

El primero en aparecer fue el lobo de madera quien se había vuelto mi espíritu mas confiable, el segundo fue la serpiente carmin por su ferocidad, el tercero era el bull negro, el cuarto el lagarto chispita, el quinto el cuervo de seis ojos, el sexto el guepardra, el séptimo la araña tela de metal ya que podría ser útil, el octavo se trataba de una pequeña salamandra verde, una criatura extremadamente venenosa de menos de 10 cm la cual envenenaba incluso en muerte, el noveno era un ciempiés de lava, un insecto que en la adultes llega a medir hasta dos metros de largo y genera un calor inmenso, desafortunadamente este es solo una cría de solo 30 cm, y la ultima criatura era un tejón espinoso, un pequeño matón que había matado a dos criminales la última vez.

Lucius-fuuu, estoy listo ¨asiente mientras su corazón empieza a latir más lento¨

Viejo- ¨ve el cambio de expresión de Lucius¨ bien

Dando un ultimo vistazo al viejo y a su gran enjambre de abejas de fuego me di la vuelta para ver la puerta y enfocarme en lo que se encontraba detrás.

Iiiiii *sonido de puerta chirriante*

Criminal- ¡ahoraaaa! ¨un abominable se abalanza contra Lucius¨

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Yo.

No puedo recordar bien lo que paso.

O mas bien no soy capaz de recordar todo.

En un momento estaba mirando a la puerta abrirse.

Y al otro veía al par de monos voladores siendo despedazados por una oleada de ataques que iba dirigido en nuestra dirección.

Viejo- ¨empuja a Lucius fuera del camino¨

Sumergiéndome en un extraño estado de concentración empecé a correr mientras evitaba el ataque de los criminales y al mismo tiempo comandaba a mis espíritus en todas direcciones.

El cuervo de seis ojos voló al techo del lugar y miraba en donde se encontraban los criminales.

El resto me seguía con rapidez o subía por las paredes para ocultarse en la oscuridad.

Criminales- ¡abejas! ¨genera un escudo de abominable¨

Los montones de abejas de fuego quemaron con rapidez el escudo del criminal el cual fue arrastrado por una raíz de un compañero que le salvo la vida.

El viejo se movía con tranquilidad cubriéndose entre las vigas de soporte mientras movía las manos comandando a los montones de abejas de fuego quienes perseguían a varios criminales a la vez entre el enorme laberinto de cajas que se encontraban en el almacén.

Lucius- ¨formando dos círculos en el aire¨ sigan mi señal ¨genera dos bolas de fuego verde en sus manos¨ ¡ahora!

Lanzando un par de bolas de fuego algunos de mis espíritus se movieron detrás de mi ataque para apuntar a su objetivo mientras que el resto se fue por su cuenta.

TOH joven guardián Donde viven las historias. Descúbrelo ahora