Eres mía bonita

Cap 8

-Abby-

Después de esa llamada extraña que recibí de Alina, Alessandro me noto distraída y en realidad estaba pensando en que cubrirían mi cabeza me asusta un poco por esa idiota hago lo que sea aunque la voy a matar.

-Amor ¿Estas bien?- preguntó Alessandro en el almuerzo.

-Sí, estoy bien- le dije tratando de convencerlo.

-¿Te llevo a tu casa en un rato? mi mama quiere llevarme otra vez a la empresa y quería aprovechar en decirle para buscar a Alina tiene contactos en la policía y pueden ayudar-
Me dijo y casi gritando dije que no y todos voltearon a mirar.

-¿Que sucede?- dijo

-Eh no nada, no será necesario que me lleves iré a la casa de Alina a ver a su mama me buscara el chofer- le dije

-No es necesario que le digas tampoco seguro ya ella está en su casa- y me levante rápido para que o preguntara más.

Estaba nerviosa la hora había llegado y dos hombres junto a una camioneta negra me esperaban afuera Dios que nervios.

-Señorita Abigail suba- dijo uno mostrando una capucha negra

-Dígame Abby y por favor póngame eso dentro de la camioneta no quiero llamar la atención y si me ponen eso parecerá secuestro-

El asintió con lo que dije y me subí, antes de arrancar me lo puso y me puse muy nerviosa comenzó a hablar me daba miedo no poder verlo.

-Al llegar al lugar se le bajara y al llegar a la puerta el Alpha la recibirá, si no quiere problemas le sugiero que no sea imprudente, manténgase en silencio a menos que se le pregunte algo- dijo con seriedad y yo solo me detuve a preguntar.

-¿Alpha?-

-Es humana recuerda- le dijo el otro

-No pregunte será mejor para usted-

Dijo y todo fue silencio, pasaron aproximadamente 30 minutos y llegamos porque se detuvo me tomaron de los brazos y no pude evitar asustarme, me llevaban en el aire me lastimaban.

-Ah!! me lastiman idiotas- dije y de un momento me tiraron y se escuchó una puerta, una voz ronca se hizo presente.

-Es una invitada tengan cuidado- dijo

-Disculpe Alpha- y no se escuchó nada mas

-Abigail o Abby ¿Cómo gustas?- pregunto

-Abby por favor- le dije temerosa

-Bien abby, te voy a quitar eso pero te quedaras callada sin preguntas y obedeces- dijo quitándome la capucha, santo Dios este es un ángel.

-Alina esta arriba sígueme- la preocupación me invadió pero lo seguí se detuvo en una puerta y se giró a mi.

-Ella está en un estado crítico, no la agobies con tantas preguntas y- se quedó callado

-¿Y?- le dije para que hablara

-No ha querido comer por favor necesito que coma, esta dormida-

Al entrar la Vi extendida en una gigante cama con suero, estaba llena de moretones, gasas y vendas por todos lados.

-Mi niña- dije sentándome a su lado y tomando su mano levemente para que no se despierte

Alina-

Sentí un roce en mi mano y voces no sabía cuánto tiempo me dormí, esa voz la reconozco, era abby!!!

-Cómo paso esto- la escuche.