Mi ultima mirada a ti antes de que me vaya

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Narra Ron


Veía embelesado a mi esposa dormir en mi pecho. Se veía tan tranquila. Sin contenerme empecé a acariciarle la espalda desnuda suavemente.

-mmh- susurro mi castaña apartándose de mi pecho, dándose la vuelta-

-le abrace por la espalda y le acaricie la tripa- amor -le susurre en la oreja-

Narra Hermione


Le escuchaba pero no quería abrir los ojos y que me dijera que se tenia que ir. Abrí un ojo y mire el reloj de mi mesita lo sabia: las ocho.

- Cariño escúchame se que estas despierta- dijo mi pelirrojo-

-Me di la vuelta con los ojos llorosos- que? -le dije-

- Hermione... -sentí unas caricias en mi espalda- estate tranquila volveré además ¿Cuándo fuimos a buscar los Horrocruxes volví verdad? -me dijo sonriendo-

-Hinche mis mejillas- no sabes lo preocupada que llegue a estar -le dije sinceramente- prométeme que volverás por favor sin ningún rasguño

- Te lo prometo- me dijo besándome tiernamente- despídeme de los niños- dijo levantándose- es pronto para despertarlos -dijo mi pequitas mientras se vestía-

- Te amo -dijo mi marido volviéndome a besar- volveré-y desapareció-

Volví a cerrar los ojos. Cuando los abrí mire el reloj: eran las diez me levante me puse un pijama y fui a hacer el desayuno.

- Hugo, Rose! a desayunar! -grite y al momento sentí ruidos en la escalera: iguales a su padre.

- Hola mama! -dijo Hugo mientras se sentaba en una silla- buenos días!

- buenos días cariño- le dije mientras le servía el desayuno-

- Hola mama- dijo dando un bostezo Rose y se sentó al lado de su hermano- ¿Cuándo se fue papa?- dijo mirándome-

-Hace dos horas me dijo que os despidiera de el era muy temprano para despertaros- les dije dando un suspiro-

- ¿Por cuanto tiempo esta afuera?- dijo mi niño mirándome-

- Siete días, tranquilos volverá sano y salvo-añadí al ver preocupación en sus ojos- es solo un mortifago no le pasara nada-les intente convencer y porque no a mi también


Era de noche y ya había pasado una semana. No me podía estar quieta y daba vueltas de un lado para otro muerta de los nervios. No entendía a Ginny ella cuando se iba Harry a alguna misión estaba de lo mas tranquila aunque me dijo una vez que ella esta tan tranquila porque ya se ha preocupado muchas veces por Harry y por mi y Ron es lógico: en primero la piedra filosofal aunque Ginny no lo conocía seguramente lo quería volver a ver en segundo: cuando la rescato en la cámara de los secretos y casi lo matan en tercero: lo de Sirius en cuarto: el cáliz de fuego Harry con tan solo catorce años entro en el concurso de los tres magos y casi muere a manos de Voldemort. Seguramente Ginny estaría que se moría de los nervios en quinto: la desesperación por no verlo en un mes. Luego los Horrocruxes. Pobre Ginny lo que ha sufrido. Fui a la cocina y me tome otra tila ya llevaba tres. Cuando iba a dar el primer sorbo abrieron la puerta: es el! mi ron! mire rápidamente el reloj: las doce.


Narra Ron


Abrí la puerta de casa. Al segundo apareció Hermione. Sonríe y la mire tenia los ojos rojos: de llorar yo había hecho igual pero alfin estaba en casa. Seguía igual de hermosa. Deje la bolsa en el suelo, corrí hacia ella y la abrace la abrace desesperadamente.

- ¿Ron mi Ron.. estas aquí? -me dijo mi esposa sollozando enterrando su cara en mi pecho-

-le acaricio el pelo- si amor estoy aquí contigo-le dije, la necesitaba tanto: oler su perfume, ver sus ojos, su risa su sonrisa, verla a ella

- Te he echado tanto de menos!-me dijo abrazándome fuertemente-

- Yo también -la cogí en brazos- y ahora a disfrutar- le sonreí pícaramente-

- jiji -rio ella mientras la dejaba en la cama- -fui a la puerta y saque la  varita- Muffiato -dije y guarde mi varita mientras me daba la vuelta y te besaba-

Mi castaña me quito la camiseta y los pantalones mientras yo le ayudaba a quitarse la camisa y el pantalón. La mire en ropa interior: la había echado tanto de menos. Esa noche hicimos el amor apasionadamente. Después de acabar mi esposa puso su cabeza en mi pecho y yo la abrace.

- Cumplí la promesa he vuelto y sin ningún rasguño- le dije mientras le besaba el pelo-

- Lo se, te amo Ron-me dijo besando mi pecho adormilada-

- Y yo,  Hermione- y después de decir eso los dos abrazados caímos en los brazos de Morfeo



   

Más felices que nuncaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora