[FINAL]

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Abrió la puerta para encontrarse con Yeonjun viéndole fijamente, con un cuaderno entre sus manos. Habló primero, para no perder valor.

— Yeonjun... ¿Tú de verdad escribiste esto? —le enseñó el cuaderno— ¿De verdad sientes todo esto por mi?

Sin dudarlo, el mayor de los dos asintió antes de hablar.

— Y tú... ¿De verdad...? —enseñó el cuaderno que tenía en sus manos.

— ¿Lo leíste todo? —preguntó, asustado.

— Me falta la última página... Pero no creo aguantar... Y-Yo... No pensé que te cayera tan mal y-

— Lee la última página, por favor.

— No puedo... —negó, con lágrimas cayendo por sus mejillas.

— Sí, sí puedes. Léela. —trató de regular su respiración.

Beomgyu se sentía enfermo, era demasiada información en un día.

Algo asustado, el mayor continuó con la lectura de aquella última página bajo la atenta mirada de su roommate.

— ¿T-Tú...?

— Sí, y no sabes lo que me costó averiguar mis propios sentimientos. —sonrió— Por favor, ayúdame porque estoy a punto de caerme. —le advirtió, sonriendo sus piernas flaquear.

En cuestión de segundos, tuvo a Yeonjun sosteniéndole por la cintura mientras lo guiaba al sofá.

— Y-Yo... No sé qué más decirte. —habló Beomgyu apenado— Simplemente... Siempre me hice a la idea de que el amor romántico como tal era para débiles y tarados...

Yeonjun solo lo observaba.

— Olvidé que siempre fui tarado. —hizo una mueca— Y ante ti, me sentí débil desde la primera vez que te vi.

— Gyu... —se tomó el atrevimiento de dejarle sobre su regazo, mientras lo abrazaba.

— Ya ves que hasta escribí un libro de quejas, donde cada queja es un por qué de las razones para amarte. —rió— El tonto aquí siempre fui yo.

— ¿Puedo besarte? —el mayor sonaba tímido.

— Pues claro, estamos saliendo ahora, ¿o no? —lo miró fijamente.

— Sí, definitivamente lo estamos. —sonrió.

Por fin, ambos terminaron besándose y riendo por el hecho de que estaba algo salado, debido al llanto previo.

— Gracias por enamorarte de mi, estoy seguro de que es algo difícil. —Beomgyu acarició las mejillas del contrario.

— Lo difícil aquí hubiese sido no hacerlo. Mírate, me hice un esguince por tu culpa. —le recordó, haciéndolo sonrojar.

— ¿Quieres cenar fuera hoy? Prometo hacerte otro pastel luego.

— Lo que tú quieras para mi está bien. —sonrió— Después de todo, estoy contigo.

— Si continúas diciéndome esas cosas, voy a odiarte mucho más, lo juro.

Sabiendo lo que aquellas palabras significaban, Yeonjun sonrió.

Prometo que vas a odiarme para toda la vida.

FIN.

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wiiii gracias x leer este yeongyu, con el pov de beom ❤ les tkm. ❤

LIBRO DE QUEJAS - YEONGYU SHORTFIC [LADO A] [TERMINADO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora