𝐄𝐥 𝐏𝐚𝐝𝐫𝐢𝐧𝐨 ◽ EunHae (+18) (Adaptación)

Capítulo 9

•••

Hyukjae llega pasada la medianoche, cuando Donghae, una vez más, está sentado mirando el televisor, solo en la oscuridad.

Donghae no lo ha visto desde el incidente en el baño del club, Hyukjae desapareció poco después, y está contento por ello. No hubiera sido capaz de mirarlo a los ojos sin querer morir, o desear haber estado listo para enfrentarse a él esta mañana, no habría tierra que se abriera y lo tragase entero.

Pero ha tenido un día completo para procesarlo, y no está tranquilo, en absoluto, pero ahora puede hacerle frente.

Hyukjae se detiene en la sala de estar, mira el televisor.

— ¿Ven a Cenar Conmigo?

—Sí.

—¿Quieres una taza de té?

—Sí, si vas a preparar una para ti.

Hyukjae va a la cocina, pone el agua a hervir, y las cosas se sienten casi normales. Y mientras Donghae sabe que se está mintiendo a sí mismo, es un mecanismo de defensa así que sigue la corriente.

—Aquí tienes—le dice a Hyukjae un minuto más tarde, entregándole una taza de té caliente.

—Gracias.

Hyukjae se sienta junto a él, pone sus pies sobre la mesa de café y sopla el vapor de su taza.

—¿Dónde estamos hoy?— Pregunta, señalando el televisor.

—Jeju.

—Fuimos allí en vacaciones una vez.

Donghae vuelve la cabeza para mirarlo.

—¿Cuándo eran niños?

—Sí—dice Hyukjae, moviendo la cabeza— La familia de Siwon tenían una casa allí. No estoy seguro si aún la tienen.

Donghae resopla y sonríe.

—Parece que tienen casas en todas partes.

—Bueno, al menos sabes que nunca te quedarás sin casa—dice Hyukjae con una sonrisa.

Permanecen en silencio, y así se mantienen a través de la mitad del episodio antes que el mecanismo de defensa de Donghae se venga abajo. Él estuvo bien mientras que Hyukjae no estaba aquí, y estuvo bien mientras Hyukjae le estaba hablando, pero ahora están aquí sentados, y no se dicen nada, y el elefante en la habitación continúa creciendo hasta que Donghae no tiene que mencionarlo, no puede simplemente esconderlo bajo la alfombra, como tanto lo desea.

Respira profundo para darse valor.

—Mira, sobre lo de anoche...

—No hay nada de qué hablar—dice Hyukjae al instante, interrumpiéndolo como si hubiese estado esperando. Su tono es bajo y oscuro, con un toque de advertencia.

Sin embargo, Donghae no puede dejarlo pasar, porque es un idiota tenaz, y Hyukjae no puede verse afectado por lo ocurrido. Nunca ha estado en ese tipo de situación antes. Mirando algo que no debía, algo peligroso, incapaz de apartar la mirada. No puede quitárselo de la cabeza, y no quiere que Hyukjae piense que no le importa, que no siente culpa o incomodidad por haber invadido un momento tan íntimo. No sólo lo invadió, se quedó ahí mirando.

—No fue mi intención encontrarte ahí.

—Es un baño público, Donghae—dice Hyukjae llanamente—¿Cómo podrías haberlo hecho a propósito?

—Tú, quiero decir...—No puede creer que esté a punto de preguntar esto, pero tiene que saber, ha tenido la pregunta dando vueltas en su cerebro durante todo el día—¿Es algo que haces comúnmente?

Hyukjae se toma unos minutos para responder.

—Un hombre tiene necesidades—dice lentamente con tono medido. Mira su taza mientras habla—Pero por lo general no soy tan...me gusta pensar que tengo más dignidad que eso.

—Entonces, ¿Por qué lo hiciste anoche?

—Supongo que simplemente no tuve la paciencia para ir a un lugar más privado—Sonríe irónicamente y luego mira a Donghae, y es el primer contacto visual adecuado que han tenido desde que abordaron el tema—Estaba demasiado...animado.

Excitado, es la palabra que estaba buscando y Donghae se lame los labios, quiere presionar para que le diga más, busca algún indicio de algo más en la cara de Hyukjae. Pero no sabe cómo puede hacer más preguntas sin que sean inadecuadas, por lo que con un suspiro de decepción decide no hacerlo.

—Bueno, aún así. Lo siento.

Hyukjae aún no ha apartado la vista, y las luces del televisor están reflejándose en sus ojos mientras mira fijamente a Donghae, y una vez más observa la boca de Donghae, sólo que no ha bebido alcohol en este momento y no tiene ninguna excusa para su comportamiento.

—Si por algo vas a disculparte, Donghae—dice casi en un susurro, o entre dientes sería más adecuado—no es por mirar cuando me encontraste ahí.

Donghae traga y trata de nivelar su respiración.

—¿Entonces por qué?

Hyukjae lo mira directamente a los ojos, Donghae no tiene la capacidad o el deseo de evitar su mirada cuando dice, lentamente y con toda intención.

—¿Qué piensas que me puso tan animado en primer lugar?

—¿Fue...—se le quiebra la voz y su estómago se retuerce, quiere alejarse de esta conversación casi tanto como quiere acercarse al calor corporal de Hyukjae—no puedes decir que fue porque yo estaba bailando para ti—su voz suena como un graznido—me veo estúpido cuando bailo?

Los ojos de Hyukjae brillan con algo oscuro e irreconocible y tuerce los labios como si quisiera hacer una mueca, sonreír, o solo demostrar lo que acaba de cruzar a través de su cabeza.

—No, no te ves estúpido—dice con voz entrecortada—Y no dejes que Siwon te escuche decir eso.

—Él ya sabe que no bailo bien.

—No—Hyukjae lo mira enérgicamente y ya no hay nada encubierto. Donghae puede verlo todo ahora—Que estabas bailando para mí.

Las palabras quedan en el aire entre ellos y se miran el uno al otro, en esta oscuridad, este manto de la noche, se siente como si sólo ellos dos existieran, Siwon no está en la habitación de al lado, no hay nada que impida a Donghae de expresar esos pensamientos peligrosos que acechan en los bordes de su conciencia.

—No fue mi intención decir eso—dice sin negar lo que dijo Hyukjae, pero tampoco lo admite. Terreno seguro y muy alejado de lo que realmente quiere decirle.

Hyukjae sonríe, pero lo hace sin alegría alguna. Entonces aparta la mirada, se acomoda en el sofá y acerca su taza a los labios.

—Y no fue mi intención mirarte cuando bailabas—dice antes de tomar un sorbo—Todos hacemos cosas que no debemos, a veces.

Hay tanta verdad velada en las palabras y el tono de Hyukjae que la cabeza de Donghae da vueltas. Todo lo que puede hacer ahora es alejarse y pronto.

—Tengo que irme a la cama.

—Sí—dice Hyukjae, con la mirada fija en el televisor —Buenas noches, Donghae.

No se siente como el final de la conversación, en absoluto. Se siente como el comienzo de algo que va más allá de las palabras.

Donghae no puede dormir hasta cerca del amanecer.

•••

Los siguientes capitulos se estan subiendo con mucho respeto para HJ y para su familia desde aqui mandarles un abrazo enorme y mucho apoyo para este dificil momento. Les pido que seamos la contencion tanto de HJ, como de los demas chicos que es lo importante ahora, seamos esa contencion que ellos han sido para nosotras.

Y eso 

Disfruten la lectura.