[Nueva York, 2007]
ALEXANDER LIGHTWOOD
Mi corazón se aceleró, podía sentir como mi cuerpo se volvía preso del miedo y corrí.
No sabía a donde iba, pero mis piernas corrían sin tener intención de detenerse. Podía escuchar como las ramas y las hojas secas crujían bajo mis pies, al igual que podía sentir a aquella bestia persiguiéndome y pisándome los talones.
Sus gruñidos eran claros, fuertes y cada vez más cerca de mí. De un momento a otro mi respiración se vio bloqueada, al abrir los ojos comprendí que no estaba en el bosque. Ahora flotaba en un cuerpo de agua, tal vez una laguna. Nadé a la superficie, pero algo me jaló al interior, en la oscuridad alguien o algo me estaba sujetando de los tobillos para arrastrarme a la profundidad.
La desesperación me invadió, quería llorar, y no fue hasta que logré respirar otra vez. Despertando de aquella pesadilla.
━ ¡Alec! Alec, fue un sueño.
Desorientado miré a mi hermano, mi respiración seguía agitada y mis manos las sentí húmedas. Estaba empapado de mi sudor.
━ Estás bien, estás bien━ Tony me abrazó.
━ Se sintió tan real━ me aferré a él, aún mis manos temblaban del miedo y apreté los ojos.
━ Tranquilo.
Se apartó de mí, acomodando mis mechones rebeldes que se pegaban a mis cienes y frente por el sudor.
━ Son las 6, debemos ir a la escuela así que arriba, Gideon━ se puso de pie, caminando a las ventanas para poder abrir las cortinas.
La luz del amanecer ingresó, iluminando la habitación. Tuve que entrecerrar los ojos, acostumbrándome y me puse de pie, dirigiéndome al baño.
━ Te esperamos abajo, y deberás lavar al Señor Mu. Tiene más saliva y sudor que manchas negras━ bromeó, y tras un instante, pude escuchar cómo se cerraba la puerta.
Solté un suspiro, mirándome al espejo y me quité la camiseta. Mi cuerpo pálido y sin mucha musculatura, pero tampoco podía decir que soy un escuálido. Al lado de Jace y Tony, si soy algo delgado. Mis ojeras estaban más marcadas y mis labios resecos.
━ Solo es un sueño, Alec. No hay nada de que temer.
Me metí a la regadera tras despojar cada prenda de mi cuerpo. Llevo días sin dormir como se debe, dejando de lado mis deberes escolares, no paso de dormir una hora o menos. Desde que tengo memoria, he tenido sueños así, muy lúcidos para ser sueños, pero todos me convencieron de que nada podría dañarme.
Pase mi mano con el jabón sobre el rasguño de mi pierna. Un zarpazo de cuatro garras, cortes no tan profundos.
¿Cómo le explico a mi familia que esos sueños sí me hacen daño?
ESTÁS LEYENDO
Lobo protector || Alec Lightwood
FanfictionTras la muerte de Aldo Moon Wolf a manos de un grupo de cazadores, la manada Luna de Lobo quedo a cargo de su hija, Sam. Para alguien que nació siendo especial, se le es difícil encajar y comprender a los demás. Sam apenas era una recién nacida cuan...