I think he did it
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-¿Tendrás guardia por tercera vez esta semana?-Le preguntó Sally con una sonrisa irónica en el rostro a Taehyung.
-Si, ¿Por qué esa cara?
-Antes decías que mi cara era hermosa, ¿Qué tiene de malo ahora?- Estaba a punto de sollozar, no lo podía ver a los ojos, si lo miraba a los ojos se rompería frente él.
-Sally, No estoy de ánimos para tener una pelea contigo, desde que Bae enfermo, todo el tiempo estas a la defensiva, me estás agotando.-Dijo mientras terminaba de atar su corbata y acomodarla para después ir en busca de su saco.
-Tienes razón, desde hace tiempo no tienes ganas de hacer nada conmigo, iré por Bae, ya debe de estar despierto.-
Sally salió de ahí lo más pronto posible, no lo podía enfrentar sin querer llorar, todo lo decía en un hilo de voz, incluso ella se llegaba a desesperar con ella misma. Todo su perfecto mundo se había destruido, no era tan perfecto como ella creía. El sentimiento de tristeza abrumaba su ser, la persona que juró amarla para toda su vida, ya no lo hacía en cambio la miraba con desprecio, no hay peor sentimiento que ver como la persona que amas se aleja poco a poco de ti, sus miradas ya no eran de amor ya no emanaba esa dulzura, Tae Tae se convirtió en Taehyung.
...
Ese día Taehyung llegó a casa por la tarde, no tuvo ninguna guardia, Bae estaba feliz de ver a su padre con él; Tenía semanas preguntando por su padre, que verlo ahí con él jugando a la pelota lo hacía feliz, no entendía porque su madre lloraba todo el tiempo y su mirada era triste.
Después de jugar toda la tarde con Bae, Sally los esperaba a ambos con la cena, no podía creer que Taehyung estuviera allí con ellos, y solo por ese día quiso engañarse una vez más, ver la sonrisa de su hijo y su rostro iluminado porque su padre estaba a su lado no tenía precio, Bae había estado decaído desde hace semanas, pero Taehyung parecía ser el remedio perfecto para el pequeño.
Solo por hoy haré como si mi familia fuera perfecta.
Taehyung había llegado a casa con pastel de fresa, el favorito de Bae y de Sally, llegó a ellos como el padre y el esposo que había sido antes de que todo se fuera a la mierda. Compartieron la mesa como una familia que se amaba, Sally y Bae fueron felices con aquella felicidad falsa que les brindó el moreno, al menos quería que sus últimos recuerdos fueran felices, eso se había dicho, después de todo Sally había sido una buena esposa en esos años y el niño era de cierta forma agradable.
El plan era sencillo quería librarse de aquello o aquellos que le estorbaban.
El pastel era el favorito de ambos, siempre detesto la fresa, era alérgico a ella, todo este tiempo había estado comprando aquel bizcocho tan desagradable para él, incluso le daba náuseas el solo aroma a fresa.
Pasó gran parte de su vida al lado de alguien a quien nunca amó, intento pero nunca pudo sentir algo por la que llamaba su esposa, todo era una maldita mentira, un engaño que se inventó y hasta cierto punto de su vida se creyó, no conocía la palabra sinceridad, estudiaba a las personas y les decía lo que querían escuchar, la vida era sencilla de esa forma.
Así fue también como hizo su matrimonio, a base de mentiras que en algún momento colapsaría sin compasión alguna, estaba sucediendo en estos momentos, era consciente de ello, pero ya no le importaba nada.
Había encontrado a alguien con quien podía ser como realmente era, no llevaba una máscara al estar a su lado, todo se sentía de verdad y no una actuación. Llevaba tanto tiempo como actor que se olvidó que detrás del personaje que interpretas esta la persona real.
Dentro de unas horas ambos sentirán náuseas...
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AAAAAHHH Me emociona mucho escribir esta historia, lol.
Llevo meses desarrollando la idea 🥲
