KIYOSHI | Boku no Hero

c a p i t u l o (32)

[capitulo 32: Nuestras fortalezas también nos hacen vulnerables ]

La intensidad de las emociones estaban a rebosar, el aire se asentaba enérgico, vieras por donde lo vieras. 

Muchos por primera vez vieron una faceta de la chica pelinegra, encorvada en cuclillas, murmurando con una mano en la barbilla y con la otra, junto a al chico autodestructivo del 1-A, trazando un plan en el aire, susurros y voces bajas.

En aquel momento estaban en la misma sintonía.

—¿Y si usamos a Bakugo para carnada de los puños del anciano?—preguntó.

—No haremos eso.—dijo suspirando enervado, observo como la chica volvía a su posición inicial, extensa en el suelo, como una estrella, murmurando "Dame diez..." con los ojos cerrados, respiraba y exhalaba por la boca, profundo. 

Estaba cansada, a diferencia de el que tenía las energías y los nervios a mismo nivel. 

De Bakugo, ambos no sabían nada, pero tras la infinidad de posibilidades planteadas con la pelinegra no dieron con un plan base...Midoriya no podía siquiera pensar en enfrentarse a AllMight, Kiyoshi lo sabía, hacia rato que le estuvo proponiendo una estrategias donde se plantaban los  tres para derrotar al numero uno, sin embargo, Izuku Midoriya daba por sentado que eran mucho menos que un golpe de mosca alado del honorable sujeto. 

Los diez minutos pasaron rápidos, la carga con todo lo que estaban cargando bajo sus hombros ambos chicos, llego a un punto de estrés mutuo. 

***

—¡Kacchan!

El disgusto en la mirada  de la pelinegra que ni se dio por contener apenas vio al rubio explosivo puso más iracundo de lo que estaba el chico, la chica puso los ojos en blanco apenas escucho la verborrea que soltaba Katsuki y su competitividad enferma, se cruzo de brazos, miró como la actitud confiada del chico pecoso se fue a la mierda apenas pusieron un pie en la arena de combate. 

Sabía lo que se venía, a diferencia de los varones que estaban pasos frente suyo, aún discutiendo, se puso en guardia, mirando hacia todos lados. Tocando el suelo cada tanto.

—Allmight no estará esperando de frente, aun no somos capaces de siquiera hacerle un rasguño, debemos escapar a la linea de...—Habló con desesperación Izuku—¿¡Quien crees que es AllMight!?—chilló. —Kacchan no podemos vence--

PAM!

Un guantazo derecho a boca del peliverde, Shoyo corrió hacia el pecoso que se sostenía los labios y miraba asustado a "amigo".

A este paso voy a reprobar...mierda, pensó la única con la mente fría en la situación. Sabía que si alzaba la voz un poco sobre la de esos tóxicos, desencadenaría una pelea interna de nunca acabar, pero ver Izuku tumbado en el suelo, aquello le supero.

—¿Es enserio bestia?—por fin habló.

—Espera Kacchan, ¡te digo todo esto para que todos tengamos la oportunidad de aprobar! 

—Es todo o nada, a mi no me importa si quedas en el curso de héroes, maldita bruja, te adaptas o de vas.—apunto a su competencia femenina despectivamente. Y nuevamente, comenzaron a gritarse, la imitadora paso de ellos, maldita sea, un solo día, solo un día que se lleven bien sin gritarse. ¿Era mucho pedir? 

—¡Aquí voy!—si, aquel que dijo eso era AllMight. 

Sabía que aquellos estaban muy centrados en su infantil pelea, se posiciono esperando aquel golpe predecible en su mente, se puso cuclillas y con su palmas abiertas, a sus costados, alzó muros casi igual de altos que los edificios, y detrás de ellos, uno tras otro, para que la ráfaga de aire no los enviase muy lejos.