⌕. › 𝖂𝖊𝖑𝖈𝖔𝖒𝖊 𝖙𝖔 𝖙𝖍𝖊 𝕬𝖗𝖈𝖍𝖆𝖓𝖌𝖊𝖑 𝕬𝖈𝖆𝖉𝖊𝖒𝖞
𝐓𝐑𝐔𝐂𝐈𝐙𝐍𝐀 𝕴🃏
"𝗘𝗹 𝗮𝗺𝗼𝗿 𝘆 𝗹𝗮 𝗺𝘂𝗲𝗿𝘁𝗲 𝘀𝗼𝗻 𝗯𝗮𝘀𝘁𝗮𝗻𝘁𝗲𝘀 𝘀𝗶𝗺𝗶𝗹𝗮𝗿𝗲𝘀"
Nabala es una chica muy fan de las hadas y las mariposas, estando en la academ...
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Nabala Patnesh.
La señora que servía la comida me habló así que voy a ella y a cada señora para que me sirva la cena.
-¿Cómo sabes mi nombre? -pregunté curiosa.
-Eres la chica que fue a enfermería en una bata de baño y de regreso con una bata de paciente, sin descartar que eres la chica nueva, debes de saber que aquí todos se enteran de todos. Gracias-dice mientras les agradece a las señoras.
-Solo llevo unos cuantos días acá y ya me he dejado en ridículo-digo apenada y también le agradezco a la señora.
-Pronto se les va a olvidar, tú tranquila-trata de animarme y yo le doy una sonrisa.
-Bueno, me toca sentarme en aquella mesa-digo señalando la que estaba justo al final-nos vemos- me despido y camino para poder tomar un lugar. Sin embargo, las personas ponían cosas e impedían que yo pudiera sentarme, me evitaban y se comportaban como si yo fuese un bicho raro (lo cual seguro era cierto) suelto un suspiro y dejo caer mis hombros como resignación, busco en alguna otra mesa otro lugar, si no, me iría a mi habitación a comer.
-Tal parece que ya no hay espacio-menciona la misma voz de antes.
-Creo que iré a decirle a la señorita Sullivan, para que me asigne otra mesa-definitivamente, la suerte no estaba de mi lado.
-Ven, mejor siéntate con nosotros- me invita a que lo siga.
-¿Nosotros? -quise corroborar.
-Sí, mi grupo de amigos y yo-camina hacía una mesa diferente y lo sigo, noto que hay una mesa alejada a todas las demás y ahí puedo ver que hay un grupo de chicos riendo y cenando. Al llegar todos se detienen y me miran, todos los pares de ojos estaban en mí, otra vez.
-Chicos, ella es Nabi-me presenta-ven, siéntate aquí-me ofrece una silla y yo la acepto, pongo las cosas en la mesa para después hablar.
-Mucho gusto, mi nombre es Nabala, pero todos me dicen Nabi-está vez me presenté yo.
-Mucho gusto, belleza, yo soy Paimon Choi -se presenta un chico que estaba sentado a mi otro lado, este era demasiado guapo, tenía un rostro un poco perfilado y sus ojos rasgados de manera linda, tenía su cabello corto y de color entre azul y morado.
Más bien, todos en esa mesa eran demasiado guapos, parecían chicos de la realeza y te daban una impresión de que fueron creados para deslumbrar, dios creó a los hombres y como disculpa, creó a estas semejantes personas.
-Mucho gusto, Paimon-le doy la mano y aunque él la mira por un rato, después la toma, me da una sonrisa y besa mi mano.
-Muy bien, eso fue suficiente-otro chico se inclina hacia nosotros y aparta mi mano con la de Paimon. -Yo soy Nékir Woo, es un gusto que estés sentada con nosotros, chiquilla- me da un pequeño y débil golpecito en mi nariz.
