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-Muy bien, empiecen!— ieiri le indicaba a los chicos las posiciones para el concierto.

Los chicos comenzaron a bailar su coreografía, pero iban a usar tipo ganchos para que se pudieran elevar, así que estaban practicando la coreografía.

-y en uno, dos... ahora!—

Los chicos se acercaron a sus posiciones y los engancharon; los alzaron a unos metros del escenario, esperaron ahí unos segundos hasta que los volvieron a bajar.

-Como lo sintieron?—

-El chaleco lástima un poco—se quejó Tae—

-Yo lo sentí  bien, y ustedes?— les pregunto Robaire volteando a ver a los demás

-Esta bien—contestaron

-Creo que me lastime ie—Tae se tocaba la parte baja del brazo

Ieiri se acercó a él y le dijo que se quitara el chaleco, lo revisó un poco quería encontrar que era lo que era molesto para tae, al encontrarlo se dio cuenta que era una mala costura, así que mando ah que si siguieran otro chaleco.

Se pasaron la tarde practicando la mitad de los ensayos, eran horas en las que estaban bailando y cantando, terminarían muy cansados saliendo del ensayo.

al ya caer la tarde/noche, ieiri los llevó a cenar a un lugar de la ciudad.

Según ellos tenían antojo de comida china, y Ieiri y Kugi sabían muy bien a qué lugar ir a cenar.

Aunque Aaron vivió ahí, no estuvo el tiempo suficiente tiempo viviendo ahí como para conocer los mejores lugares para comer.

-A donde iremos es el mejor lugar en todo Toronto!—exclamó demasiado feliz Kigi— hace años que no voy... que nostalgia— dijo con una sonrisa mientras se limpiaba lágrimas falsas

-Esta muy lejos?— dijo tae— tengo mucha hambre y no creo alcanzar—caminaba con pesadez

-Ten—ieiri sacó de su bolso una barra nutritiva— es para que aguantes un poco más

Ah tae le brillaron los ojos y en segundos ya se había comido la barra dejando solo migajas.

-Vamos rápido rápido—Kugi los apuraba a que subieran a la camioneta

Ieiri manejo hasta tal lugar, fueron por lo menos 30 minutos, pues estaban del otro lado de la ciudad y el lugar estaba en el centro.

En el recorrido Aaron comenzaba a recordar algunos lugares, pues fueron casi 10 años desde que no venía aquí, eran muchos sentimientos encontrados.

Bajaron del auto y miraron el pequeño local que estaba frente a ellos.

-Fideos Gun-mi?—lo leyó Z

-Así es estimado Arón— asintió kugi— pero no son solo fideos— lo vio de reojo— estos son los grandiosos y únicos fideos Gun-mi, la diosa de la familia culinaria, estos son los mejores fideos del mundo— se paró enfrente y abríos sus brazos mostrando el pequeño local.

Todos la vieron con un brillo en los ojos, aunque Kugi estaba siendo exagerada, todos la siguieron.

-Entremos— dijo decidida a entrar

Los chicos dieron detrás de ella como patitos siguiendo a su madre, de verdad estaban muy emocionados.

Él logra era algo acogedor, las pequeñas mesas de madera, los cojines en el suelo y el olor a comida casera, era lo suficiente Moo para que los chicos le creyeran a Kugi.

Como eran 7 tuvieron que usar dos mesas, en una estaba Jesse, Robaire, Z y en la otra estaban Kugi, Aaron, Ieiri y Tae.

Este último veía el pequeño menú con un brillo en sus ojos, pues eso era lo más parecido a los platillos de su país natal.

𝐏𝐫𝐨𝐦𝐞𝐬𝐚𝐬-𝐀𝐚𝐫𝐨𝐧 𝐓 𝐱 𝐎𝐂 𝐟-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora