𝐏𝐫𝐨𝐦𝐞𝐬𝐚𝐬-𝐀𝐚𝐫𝐨𝐧 𝐓 𝐱 𝐎𝐂 𝐟-

𝐂𝐚𝐩𝐢́𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟐𝟐

-Y después fuimos a que nos tomaran una fotografía! Mamá remídelo toda la escena !-dijo mei feliz

"Ya me lo imaginaba"dijo ieiri con una con sus labios en línea

-Te divertiste?-dijo ieiri con una sonrisa

-si! Después fuimos a comer! Y después a dar un paseo!-dijo feliz

-Qué Bueno que te diviertas-estaba muy feliz por su hermana menor

Ieiri tuvo una infancia muy diferente a la de mei

-Ieiri ya pasó mucho tiempo... cuando vendrás?-dijo un poco desanimada

-No lo se... últimamente tengo mucho trabajo y ser médico es dedicarle mucho tiempo a los parientes... pero
Iré pronto lo prometo-la verdad quería ver así hermanita pero no podía, no quería volver a ver a su madre

-Esta bien, creo en ti-dijo ya más feliz

-Mei a tus clases de flautín !- se escucho por el teléfono.   Era su madre

"Así que ya la metió en clases"Recordó cómo la metió a clases de carate,piano,basquetbol, tenis

-ieiri me tengo que ir, nos vemos!-y corto

Ieiri guardó su teléfono y pensó en lo de ir a ver a mei

"Si ella me ve... que pasará?"

Ella caminaba por las frías calles de la noche, todavía había gente ya que se fue por los rumbos de locales y ese tipo de cosas

"Y si me prohíbe verla?..." se cuestionaba ella temerosa, pues su madre era muy estricta y ella desidia por sus hijas quien era buena influencia y quien no

Mando esos pensamientos lejos y volvió a la normalidad, en las grandes pantallas pudo observar a 5 chicos demasiado conocidos para ella, pues ya hace un mes debutaron y hasta ahora no había visto nada tan llamativo como publicidad de ellos

Toda la gente estaba observando esas pantallas donde aparecían, pues desde su primera semana, tuvieron demasiadas críticas buenas, les dieron apoyo desde su debut, sin duda sería un grupo prometedor en el futuro

Ieiri sonrío y siguió caminando

Ya estaba más cerca de su casa, abrió la puerta y la recibió kugi que estaba en la mesa tiñéndole el pelo a una cliente

-soy ya llegaste, hola ieie!-dijo kugi levantando la mano en forma de salido

-Hola-

Ieiri se dirigió a su cierto ya que debía cambiarse por ropa más cómoda, se puso una blusa floja, unos pantalones deportivos flojos y unas sandalias, todos eran de colores obscuros

Una vez cambiada, arreglo todo en su habitación y en su pequeño mueble vio la caja de cigarros de hace unos meses que no se acabó

La tomó y la abrió para ver cuántos quedaban, tenía todavía 6

-Tanto tiempo los deje?-

Recordó en el internado cuántas cajas le daban, pues en su adolescencia su que fumó demasiado, pero eso para ella era una forma de evadir todo esos recuerdos que odiaba, y nunca se dio cuenta de cuánto consumía