TIRANO

CAPITULO 2: La familia es la familia

~CAPÍTULO 2:
La familia es familia~

Asher Evans

Estaba tranquilo en mi oficina y de repente entró Sara.

—Hey Asher, mi amigo—me habló dulcemente, ya sabía por dónde iba.

La miré molesto y serio —Ni pienses que te voy a vender drogas, estás muy equivocada, me debes doscientos dólares—le refresque la memoria 

—Sí y por eso traje mi alcancía de cerdito andante—señaló a una chica, la cuál estaba apoyada en la puerta.

La chica tenía un lindo cuerpo, pechos pequeños, no tenía la cintura más pequeña del mundo, sus caderas eran de la proporción pero no era ancha de hombros. Sus ojos eran color café oscuro y su cabello era castaño claro, vestía unos tenis blancos y un vestido ni muy largo ni muy corto, con mangas cortas, de color azul marino.

Tenía que admitirlo, la chica tenía lo suyo, tenía de todo menos cara de tener dinero.

—¿Vas a prostituir a una chica, para pagar tus deudas?—pregunte, por qué no le aceptaría que trajera una chica y que me la cogiera y eso sería mi paga.

—¡¿Crees que soy un monstruo?!—Exclamo—Es mi prima idiota, aún que si te la regalaría para pagar mis deudas, pero no—contesto—Ella tiene mucho dinero.

Se acercó a mi escritorio dejando un Royo de dólares en el — Esto cubrirá lo de Sara,lo que debe—la observé a los ojos, ya que haci puedo apreciar la honestidad —y lo que llevará, si sobra te lo quedas.

Tome el rojo y empecé a contar, habían más de trescientos dólares.

—¿que edad tiene?

—tengo quince

—¿En qué trabajas?

—Soy modelo

—y de las mejores—recalcó Sara.

Deje la bolsa con pastillas y se fueron.

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Entramos a la casa, ya habíamos dejado el reemplazo, en la noche y así nosotros podíamos dormí.

—Muchachos—Habló la abuela —La cena está servida, vayan a lavarse las manos—pidió.

Nos lavamos las manos.

La Abuela, fue y sigue siendo una gran gánster, y su nombre se repercute mucho en el mundo del narcotráfico. 

Tengo claro que no son mi familia sanguínea, pero la familia es donde te sientes en casa, dónde se siente un calor tan acogedor, la familia es lealtad y esa lealtad es inquebrantable. 

¿Cómo llegué con los Evans ?

Mis padres tenían deudas con la Abuela (Lidia) y como pago les dió lo más preciado que tenían, no sirvió de mucho por qué los terminó matando de todas maneras, aún si la Abuela me crió como uno más de ellos y me dió el apellido.

Me senté en la mesa junto a Dan y la Abuela Lidi.

—¿Que tal las ventas?—consultar

—Sara nos pagó los doscientos dólares que nos debía—comentó, metiéndole el tenedor con spaghetti a la boca.

—¿Cómo demonios paga si a esa chica no le dura un quinto si no lo gasta en droga?—se preguntó.

—Su prima es modelo.—conteste.

—Oh!—Interrumpió entusiasmado—dios abuela, deberías de conocerla es un ángel, se llama Brisa—sonrió—deberías hablar más con ella—Dan se metió un poco de spaghetti a la boca, los mastico y trago—Tiene quince.

—y yo dieciséis—conteste irritado 

—Me parece una excelente idea además es familiar de Sara, además Sara es como una más de nosotros —bebió de su vaso de agua.

—No estaría mal que tuvieras una amiga, tienes solo amigos y Laura—mencionó Dan y Laura es mi perrita una Doberman.

Me negaba a hablarle, además ¿Es enserio ,tan linda pero ¿Familiar de Sara?.

Me levanté bruscamente de la mesa, me dirigí a mi habitación cerrando la puerta de un portazo. 

Estaba acostado en mi cama.

Aún recuerdo cómo se vio su trasero cuando se volteo detrás de Sara. 

Se veía grande pero nada extravagante, sino que como el de Kylie Jenner, solo que más natural, y una tanto más pequeño.

Solté un suspiro.

Tocaron mi puerta y sin que yo dijera pase, entró Dan.

—Tenemos que ir a una fiesta, a vender—aviso —y llevaremos a Sara y Brisa.—salió de mi habitación después.

Demonios!

Golpe la pared.