¿Es posible tenerle un amor-odio a un hogar?
Lo era para mí, odio la academia, odio entrenar, odio a mi padre, odio las estupidas misiones a las que papá nos enviaba, por otro lado, amo a mis hermanos, amo a mamá y a Pogo.
¿Cómo culparme? Papá es un moustro, hasta la fecha lo sigue siendo, todavía recuerdo mi horrible niñez a su lado, recuerdo toda la mierda que nos hacía.
Era algo bueno salvar personas, me gustaba ir a misiones fuera del país ya que así podía visitar más lugares, pero cada que pasaba algo así era por una estupida misión, aveces quisiera que las cosas fueran diferentes, pero es imposible viajar al pasado y cambiar las cosas sin que algo malo pase.
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Esta es una historia con un Ben que nunca murió, el primer capítulo será muy corto pero intentaré que los demás sean largos
