ⲥⲟⳑⲟⲅ⳽ ⲟ⳨ ⲙⲩ ⳽ⳙⲛ⳽ⲉⲧ

6. 《Vacío》

Se encontraba mirando fijamente el televisor sin ninguna atención en especifico, tenía la mirada perdida y ni siquiera escuchaba el sonido que salía de aquel electrodoméstico. Últimamente había estado pensando en lo que fue su vida esos años, no lo recordaba tan bien, todo era una especie de borrón que se sentía más como un sueño que como su propia vida, viéndolo en retrospectiva, todo aquello no era más que una inútil búsqueda de su persona de las formas más hedonistas que podía pensar, intentando encontrar algo que significara aunque sea un poco en todo el vacío que lo rodeaba. Sin embargo luego de todo lo ocurrido después de su victoria en el superfight, al fin parecía haber encontrado su ritmo, una motivación, pero además de eso, necesitaba algo más, alguien que—

Sonó el timbre de su teléfono, sacándolo rápidamente de sus pensamientos, lo tomó y al ver quién era, contestó de forma acelerada.

— Hola Sweet~ — pronunció con un deje de picardía en su voz
—Ven ya a ciudad-D, hay un monstruo nivel dragón — Se le oía ajetreado, tal vez él ya iba en camino
— Como ordene je— y escuchó un pitido, tal vez se había cortado la llamada (o le había colgado).

Justo después se dispuso a tomar su motocicleta y salir lo más rápido que pudo en dirección a la ciudad ya nombrada. En el camino no pudo evitar volver a pensar en lo de ese rato, aunque no entendía por qué ahora lo pensaba de forma tan relevante, bueno, pensándolo bien, sí lo entendía, era a causa de aquel que lo había llamado: Sweet Mask, porque él era la persona que lo motivaba cada día, muy a su manera, pero en serio lo ayudaba, veía en él la persona que esperaba ser en antaño, pero de forma genuina. No podía evitar ser influenciado por la gran determinación y responsabilidad que poseía el otro, era algo tan distinto que se sentía como si fuera lo que estuvo admirando todo el tiempo, como si aquel fuera todo lo que le faltaba, su opuesto perfecto.

Se sacudió la cabeza, debía concentrarse en llegar rápido para poder ayudar, sabía que el ojiolivo no necesitaba ayuda, sin embargo siempre lo llamaba cuando creía que había un buen monstruo para entrenar, aunque los niveles dragón le seguían dando pesadillas, estar junto a Sweet le daba seguridad.

No mucho después llegó a aquella ciudad, donde ya se podía oír todo el estruendo que estaba causando aquel monstruo, se dirigió corriendo al lugar de donde provenía el ruido, observó donde se encontraba Sweet peleando, haciendo lo posible para evitar que aquel monstruo causara daños en los alrededores.
—¡Suiryu! Golpéalo en el abdomen mientras yo lo distraigo— Decía el ahora azabache mientras aún lidiaba con todo tipo de ataques que lanzaba aquel monstruo que parecía un dinosaurio.

Asintió para sí mismo mientras se concentraba en los movimientos del enemigo, aunque aún sentía un escalofrío recorrerlo debido a los amargos recuerdos que le traía, sentía que cada vez podía manejarlos mejor y eso lo inspiraba a seguir entrenando; preparó su Void Fist cuando observó a aquel monstruo a punto de herir de gravedad a Sweet, en un rápido movimiento redireccionó  su ataque directo a la mandíbula del enemigo, desorientándolo un poco, para luego golpear su abdomen y que explotara en varios pedazos, Sweet lo finalizó cortándole la cabeza por si acaso y se dirigió a suiryu.

— No cambies el plan a último momento— Dijo mientras se sacaba la sangre de sus manos.

— Lo siento, te iba a atacar, yo— Sweet levantó la mirada para verlo atentamente. — No me va a pasar nada, no te preocupes por mí, no soy tan débil—

Suiryu lo sabia, era consciente de que lo más probable era que no hubiera recibido mayor daño, pero aún así actuó casi por instinto.

— Lo más importante es acabar con esas aberraciones y evitar los daños colaterales— pronunció con determinación. — se supone que todos ya evacuaron pero por ahora comprueba que no haya nadie entre los escombros, tengo que seguir trabajando — Hizo un ademán de despedida y empezó a caminar en dirección contraria.

— ¡Sweet! Deberías descansar un poco, ya con este monstruo hiciste bastante— el ojiolivo paró un momento y se giró hacia él — ¿Hmm? Esto no es nada para mí, necesito optimizar mi tiempo— el moreno sabía que el contrario era una persona ocupada, pero de todas formas, quería lograr que se relajara un poco más. —  Es importante que te tengas en cuenta a ti mismo también— pronunció intentando convencerlo — para la próxima podemos ir a tomar algo, te enseñaré a divertirte. — y sonrió con su característica soltura.

Sweet reflejó una cara de sorpresa para después sonreír un poco también. — Sería interesante— dijo tímidamente mientras se giraba de nuevo , listo para seguir su camino.
— Oh, Suiryu— recordó mientras le daba la espalda. —Buen trabajo—

Ahora Suiryu era el sorprendido, estaba a punto de darle las gracias pero de alguna forma Sweet ya se había escabullido.