blue neighborhood | kang taehyun

31 Enero 2021.

HaEun:
Dios mio. ¿Acaso eso habia sido una contracción?....
Taehyun... Señorita Woo...

Tome mi bolso previamente listo para esto, y sali sin mas de la habitacion. En el camino a la universidad tuve otra contraccion... definitivamente era hora. Las manos me comenzaron a sudar y mi pierna a temblar, estaba aterrada.
"Taehyun, ¿estás?"
Mandé un mensaje a el y uno a la señorita Woo para avisarle que estaba rumbo a la universidad, no queria ir sola al hospital.

Caminé apresurada en los pasillos , saque rápidamente mi celular y revise mi chat con Taehyun.  No habia respuesta. Rápidamente revise la foto de su horario que me habia enviado, estaba en hora libre ¿que hacía?.

No tuve que buscar mucho pues en el rumbo a la direccion vi una cabellera café reconocida sentada en el patio central.

— Taeh...

Me callé de inmediato al ver su brazo abrazando la cintura de esa chica a su lado. Seguro era SunHee, de quien me hablaba a veces. Era obvio que le gustaba por la manera en que hablaba de ella. Y su sonrisa en estos momentos lo confirmaba.
Agaché la mirada como la perdedora que era y segui mi camino. No iba a molestarlo cuando estaba con la chica que le gusta. Me tragué el nudo en la garganta y camine a paso rapido.

A penas llegué a la oficina la señorita Woo estaba ya terminando de guardar sus cosas y basicamente me llevo al hospital tan rapido posible.

Entre las horas pasaban las contracciones empeoraban. Estaba tirada en la cama del hospital esperando indicaciones mientras me tragaba el dolor causado por la fuerza que los musculos uterinos ejercian sobre mi bebé.

— ¿No vendrá...? —preguntó preocupada tomando mi mano—.

— No sé... ah... ni siquiera le dije...

— ¿Estan peleados?

Negue

— ¿Entonces...?

— No queria molestarlo... estaba ocupa... ¡Ah!

Chille en dolor tras una contraccion mas.

— ¡Enfermera!

Los siguientes minutos fueron borrosos, me dolia y me sentia exhausta. El calor de mi cuerpo era incrible.

Dios mio ¿cuánto tardaria en salir la pequeña cosa?, no tenía logica todo lo que estaba tardando.

Pero el momento llegó. A penas vi una aguja enorme comencé a llorar del terror.
Me sostuvieron enfermeros para poder ponerla y juro que mi alma salio de mi cuerpo al sentir esa cosa entrar en mi cuerpo.

— Me duele —lloré— ¡¿Que esa cosa no deberia hacer que duela menos?!

— Linda no podemos hacer nada mas que esperar, respira hondo —dijo la enfermera—.

— Respira por la nariz y sacalo por la boca, vamos HaEun tu puedes linda —dijo la señorita Woo acariciando mi mejilla—.

— Diez centimetros de dilatación, estamos listos —dijo la doctora viendo mi zona privada—

Dios el instinto de cerrar las piernas era tan fuerte, moria de dolor y vergüenza, esto era un martirio.

— Bien, HaEun linda es momento de que empieces a pujar

Negué desesperada a penas intente hacerlo y un dolor desgarrador me recorrio el cuerpo.

— ¡Puja!

Mi cabeza estaba en otro lado, no sabia si era la anestesia, o el dolor que me estaba haciendo que sintiera que no estaba en mi. Mis paredes uterinas y abdomen se contraian pero por lo que decia la doctora, la enfermera y la señorita Woo, sabia que no estaba ni a la mitad de terminada.