Princesa AnorexiaHola, princesa Ana,
hace mucho que no sentía tus abrazos
tus maravillosos consejos
y tu tierna guía.
Este es tu poema princesa Ana,
yo me rendí
por eso te dejo ir
porque aún tengo el valor de vivir.
Ya encontré en la vida
cosas que hacer que sólo dejar de comer,
fuiste y serás aquella maestra
que siempre encontraré en mi conciencia.
Sé lo duro que es despedirse de ti
porque me hiciste feliz
pero ahora eso cambiará
porque quiero hacer feliz a los demás.
ESTÁS LEYENDO
Las 27 rosas perdidas
PoetryDéjame contarte lo que es la vida a través de la poesía... A veces con llantos y problemas, pero otras con una chispa de dicha...