- Carrusel - Urss y Third Reich

Una Nueva Nacion

Así de rápido como las cosas se jodieron, se arreglaron. Pronto los culpables fueron eliminados, o bien, capturados y todo por que?

Por que un nazi había "desaparecido" de la faz de la tierra. Supuestamente, creo.

Y a pesar de todo eso, las alertas de todos los países estaban activas, listos para atacar y/o defenderse en cualquier momento.

Entre todas esas cosas, el comunista fue investigado bastante para determinar su situación en el problema, igualmente con Alemania, Italia Fascista e Imperio Jápones.

No se pasaron por alto algunos "amigos" del Imperio Alemán recientemente desaparecido.

Pero sin importar que hicieran, aún habían personas y algunos countrys libres por ahí, en silencio a la espera de ordenes que nunca llegarían. O tal vez si.

Por la tarde, a 2 meses de aquel evento tan horrible se encontraban socializando varios países con la supuesta nueva nación, la cual no tenía nombre realmente. Con la guitarra de México se puso a tocar hábilmente una canción de Juan Gabriel que el méxicano y algunos latinos cantaban emocionados levemente.

Sus manos finas pasaban por las cuerdas con delicadeza y sus ojos rojos, tiñiendo a rosado, se fijaron disimuladamente en el comunista, quien le devolvía la mirada con dulzura.

Ambos traian algo, aunque no sabía exactamente que. Por la mente del nuevo country solo habían fragmentos, apenas algunas voces, a penas algunas imágenes. Muchos sentimientos, la mayoría eran tristes... pero no parecían pertenecerle.

Detuvo su tocada a un par de minutos de terminarla, suspiró cansado y se quedó mirando por un pasillo de la casa de Alemania, algo pasó por su cabeza como un pinchazo en la piel y se levantó, llamó la atención de todos los presentes.

Inglaterra se levantó para seguirlo, Urss los detuvo al verlo tan centrado y perdido a la vez.

- Estuve aquí antes - comentó con la voz calmada

- Como? - le preguntó amablemente Francia

El menor levantó la mirada y se detuvo al lado de una de las mesitas de ahí y levantó una de las flores que reposaban en los floreros.

- A Alemania le gustan las margaritas, a Alan las amapolas - comentó con la voz más áspera

El inglés frunció el ceño extrañado, Urss comenzó a preocuparse, Alemania se sintió confundido al recordar que aquello era cierto, Francia dio un paso adelante.

- Cuando tenía 17... Ambos tenían 3 años pero ya eran capaces de hacer todo casi sin ayuda - musitó mientras su bandera cambiaba agrietándose al mismo tiempo - Cuando tenía 21... las ciudades estaban llenas de chicas jóvenes, con el cabello bien peinado y el perfume volando por el aire, jóvenes con limosinas, faldas largas hasta las rodillas, el aroma a dulce por todos lado - recordó relajando su cuerpo cerrando los ojos - Pero ahora, los días son cortos y ver el presente hace que mi vida se vea tan... patética

Su voz se fue apagando poco a poco, devolvió la pequeña flor a su lugar y su bandera re apareció lentamente; sacudió la cabeza confundido y camino al interior del pasillo en silencio

- patética patética patética patética patética - repetía incansablemente con pasos lentos

Se quedó quieto a un par de metros, la luz parpadeó y los demás se acercaron lentamente algo asustados.

El híbrido alemán se dejó caer al suelo de rodillas y se apoyó en las piernas viendo el suelo, estaba temblando.

Urss se alteró por eso y fue detrás de el inmediatamente para ponerse de cuclillas atrás de el sosteniendo sus hombros preocupado.

No podía pronunciar palabra alguna a pesar de querer hablar, solo vio los ojos de aquel pobre hombre derramando lágrimas al suelo, su mueca leve de tristeza explicaba todo y ambos se quedaron así por unos minutos que parecieron simples segundos.

- Ayudame - susurró con la voz ahogada antes de cerrar los ojos y apoyar su cuerpo en los brazos del comunista, quien se quedó viéndolo sin poder pronunciar palabra alguna