patrón

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En la habitación aumentaba el calor, Spreen literalmente había corrido a cerrar el lugar y tomarlo en brazos tal cual un costal de papas para subirlo hasta su oficina

Ahora sentado sobre el escritorio nervioso, miro al chico parado entre sus piernas mirarlo mientras desataba su corbata negra del traje que todo este tiempo se le había visto tan bien, no era algo que iba a confesar

— ¡Imbécil! Sera mejor que me dejes ir. Voy a joderte, ¿Entendiste?

Al instante sintió sus manos ser jaladas, para ser tomadas con fuerza y ser amarradas sin problema por el pedazo de tela, había tratado de forcejear pero la fuerza era clara

— ¿Que tal si te jodo yo?

Su rostro se giro, cerrando los ojos por la rudeza que las manos del pelinegro estaban utilizando para presionar sus muslos, era una completá locura el ver como habían terminado ya— Mírame Juan

Un jado escapó de sus labios, se sorprendió tanto que trató de aventar al chico lejos, pero eso solo lo calentó más. Sus manos viajaron hasta su trasero tomándolo con fuerza y atrayendolo más cerca de él, juntando sus pelvis

— ¡S-spreen! Hijo de puta te voy a mat-

Capturo sus labios de momento, callando lo ruidoso que estaba siendo, podía estar muy bueno pero escucharlo hablar tanto lo irritaba, así que lo beso sin dejarlo separarse de él, presionando cada vez más incluso simulando así pequeños movimientos

Estaba jadeando por el beso, sin aire, eso poco le importaba a él contrario. Separándose en un momento lo vió hincarse para abrir sus piernas.
Trató de cerrarlas totalmente apenado, pero cayó sobre el escritorio al sentir las mordidas duras sobre sus piernas

— ¡Ahh! De-detente

Su espalda se arqueó mientras él menor comenzaba a subir poco a poco cada vez más

— ¿Quieres que lo haga? —habló serio, mirando al rostro lo más que podía, dejando su aliento caliente y respiración erizar al cuerpo del pobre tipo de lentes

Sin una sola respuesta, sonrió de lado. Dejando besos de nuevo a sus piernas y marcando sus manos sobre sus muslos. Fue solo un instante cuando volvió a enderezarse y tomar de un jalón al cuerpo tembloroso para levantarlo, lo volteó estampando su pecho al escritorio tirando un par de portafolios de ahí

Con el pecho como soporté y sus manos aferradas a la orilla de la madera, él híbrido se dió el honor de aprovechar dicha vista, bendita falda resaltaba bien sus piernas

— Que bonito hechicero —hablo con burla, viendo al tipo tan vulnerable solo para él

Ni siquiera se controló al tomar cada nalga y moldearlas a su gustó
Estaba masajeando, tocando y presionando mientras tomaba su tiempo para sentir el volumen de ambas mejillas, dando también azotes rudos sobre ellas, escuchando el gimoteo como respuesta

— ¿Te gusta?

Dio ahora una nalgada más fuerte que la anterior, viendo de nueva cuenta al cuerpo temblar por su tacto— Mgh- si

Era un tipo de orgullo, y el ego que tenía iba a crecerle si de su boquita salía esa palabra, quería escucharla

— ¿Si qué?

Dio dos azotes más, esta vez saliendo un claro gemido, el pequeño cuerpo empezaba a buscarlo al no sentirlo cerca

— ¡Si! P-patrón

La sonrisa en su rostro era grande, fue como una descarga de placer escucharlo decir aquello que su polla creció, sin duda iba a pasarsela bien hoy, iba a hacerlo gritar, dios, haría a Juan llorar por a verlo provocando todo el día con esa falda.
Solo atinó a dar un par de besos sobre la braga roja, mientras marcaba sus colmillos

Él hechicero iba a arrepentirse de lo que haría, pero necesitaba saciar sus ganas por ahora


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La noche había sido larga. Y lo había sido principalmente para Focus y Génesis, las únicas dos personas que fueron capaces de escuchar los gritos que venían desde casa de Spreen

 Y lo había sido principalmente para Focus y Génesis, las únicas dos personas que fueron capaces de escuchar los gritos que venían desde casa de Spreen

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