Capítulo O3.

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Lan Wangji escapa de la sala de conferencias apenas cuatro minutos después de volver a meterse los pantalones y alisarse el resto de la ropa. Se lame los labios justo antes de ponerse de pie y se prueba a sí mismo donde los labios de Wei Wuxian rozaron los suyos.

Mocoso desordenado, piensa mientras sale del salón.

Entra al baño, notando que está vacío excepto por un par de pies visibles debajo de la puerta ligeramente entreabierta del cubículo más lejano. La vista que recibe a Lan Wangji cuando abre la puerta del cubículo se grabará en su mente para siempre. Wei Wuxian está de espaldas, con los pantalones bajados y un brazo apoyado contra la pared. Su espalda está arqueada tentadoramente, y jadea ligeramente mientras se abre con los dedos resbaladizos.

—Señor, por favor~ —Wei Wuxian gime suavemente mientras empuja, retorciendo sus largos dedos mientras se toca a sí mismo. Su pulso está acelerado, y su polla está absolutamente palpitante. Gira la cabeza hacia atrás para encontrarse con la mirada intensa de Lan Wangji. —Por favor, fóllame. —suplica dulcemente.

Lan Wangji cierra la puerta del cubículo detrás de él y la bloquea antes de enjaular a Wei Wuxian contra la pared con su propio cuerpo. Roza sus labios contra la parte posterior del cuello expuesto de Wei Wuxian y chupa, dejando marcas enrojecidas a su paso. Su propia polla comienza a endurecerse de nuevo mientras escucha los gemidos suaves y suplicantes del hombre más pequeño. Besa un lado de su garganta y sube por la mandíbula de Wei Wuxian antes de finalmente capturar sus labios.

Wei Wuxian estira aún más su cuello para profundizar el beso antes de que se separen. Suspira en la boca de Lan Wangji.

—P-Por favor. —gime.

Lan Wangji le responde besándolo brevemente nuevamente antes de arrodillarse y apartar suavemente la mano de Wei Wuxian de su agujero húmedo.

—S-señor, ¿qué está-ah-! —Wei Wuxian grita cuando Lan Wangji separa sus mejillas y comienza a lamer furiosamente su borde, el suave apéndice lo abre.

Si Wei Wuxian tiene una fijación con la polla de Lan Wangji, lo mismo podría decirse Lan Wagji del agujero de Wei Wuxian. Lan Wangji disfruta burlarse del hombre más pequeño, lamiéndolo hasta que ruegue por más. Un día, Lan Wangji se lo comerá durante horas, lo follará con la lengua y lo dejará dolorido, se negará a darle los dedos o su longitud y obligará a Wei Wuxian a correrse de nada más que su boca.

Pero hoy, Lan Wangji quiere follárselo.

Wei Wuxian gime cuando un dedo lo penetra, entrando y saliendo lentamente mientras Lan Wangji continúa lamiendo su entrada empapada con su lengua.

—Por favor, señor, ya me estiré. —suplica Wei Wuxian en voz baja. —Y yo... hnn... lo he extrañado. —dice aún más suave, con las mejillas ardiendo de vergüenza.

Lan Wangji lame una raya ancha más sobre su apretado agujero antes de mirar hacia arriba para encontrarse con la mirada de Wei Wuxian. Él pregunta, su voz baja y profunda, —¿Qué extrañaste?

Wei Wuxian se retuerce por un momento bajo el peso de la mirada del otro hombre. —Extrañe~ —comienza, sonrojándose aún más. —Extrañé tu polla.

Lan Wangji lo recompensa con otro movimiento de su lengua sobre su sensible entrada, lo que lo sobresaltó con un pequeño gemido. —¿Qué extrañaste al respecto?

Las piernas de Wei Wuxian se debilitan un poco y aparta la cara, enterrándola en el hueco de su brazo que está apoyado contra la pared.

Una voz firme desde abajo ordena: —Mírame.

—No puedo. —responde Wei Wuxian, tomando aire. Ha dicho muchas cosas vergonzosas antes, pero esto , decir esto en un baño público donde cualquiera puede entrar, donde está tan  expuesto, lo hace sentir abrumado.

𝐂𝐎𝐍𝐒𝐄𝐂𝐔𝐄𝐍𝐂𝐈𝐀𝐒 𝐄𝐍 𝐄𝐋 𝐀𝐔𝐋𝐀. | ʷᵃⁿᵍˣⁱᵃⁿDonde viven las historias. Descúbrelo ahora