En una sociedad dónde los Omegas no pueden ser shinobis un par de ninjas fingiran ser betas pero para mantener la mentira usan algo más fuerte que supresores lo que tiene una consecuencia afecta la memoria ya que está medicina afectan la mente para...
Se podía ver a un grupo de personas reunidas en total dies personas en un campo de entrenamiento alejado de la aldea
—Entonces está prohibido hablar de Sasuke-kun por Naruto —dijo indignadas una rubia con sus brazos cruzados
—Si... Por lo que se Naruto recibió un golpe muy fuerte pero por alguna extraña razón solo olvido a Sasuke-Kun...—explico una peli rosa con un semblante preocupado
—E-enton-ces l-los rumores s-son ciertos S-sakura-san?—pregunto una alfa peli morada con una mano sobre la boca algo sonrojada y con una mirada sorprendida
—Si...—susurro la chica
—Que fastidio—suspiro —Yo digo que es mejor así Naruto es m uy impredecible no sabemos que hubiera pasado si todavía lo recordara—explico aunque de cierta forma se sentía aliviado Shikamaru también sabía sobre el medicamento que tomaba el rubio después de todo se lo dijo Kakashi diciéndole que confiaba en él tal secreto.
—Si! Las llamas de la juventud de Naruto-kun pudieron haberse apagado!! Y eso sería una tragedia —expreso está vez un joven alfa de grandes cejas
—Si lo mejor fue que lo olvidara!—hablo un beta castaño con marcas rojas bajo sus ojos
—Concuerdo con ellos, Sasuke se fue por cuenta propia traicionando a Konoha al irse con uno de los mayores enemigos que tenemos —hablo está vez un castaño de ojos perla
—Es verdad, Sakura no te preocupes eso fue lo mejor —dijo una castaña de chongos poniendo su mano en el hombro de la Haruno cómo apoyo
—Que fastidio, yo creo que sería mejor si tú también superas a Sasuke nunca te trato bien, sería mejor que entrenes más pero no por el hazlo por tu bienestar —comento Shikamaru, la peli rosa parecía tener una pelea interna, todos se despidieron y se fueron por distintos rumbos
—Deveria superar el amor que siento por Sasuke-Kun? —la Haruno tenía un gran conflicto caminaba a paso lento por las calles de Konohagakure no sato
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Después de un corto lapso de tiempo había llegado el momento donde el rubio Uzumaki partía para iniciar con su entrenamiento junto al sannin de los sapos, Jiraiya fue informado sobre la casi perdida de memoria y todo detallado con relación a ella, incluso recibió una amenaza de Tsunade que cuidara que Naruto no se golpeara la cabeza por el momento para evitar algún daño.
—Llevas todo?— pregunto un peli plata por encima vez
—Si ka-san—respondió el infante terminando de acomodar todo en su mochila
—Seguro?—volvió a preguntar el mayor nervioso
—Si...—dijo en un suspiro algo cansado de la misma pregunta
—Llevas el medicamento “especial”?— Pregunto con seriedad, ese medicamento era algo que tendría que llevar a la fuerza por su bienestar, era algo fundamental
—Si, llevo lo suficiente—dijo mostrando el medicamento
—Me enviaras una carta cada semana?—preguntó está vez el menor con nerviosismo
—Claro que lo haré, tu no te preocupes por eso concéntrate en tu entrenamiento y por si acaso yo te enviaré más del medicamento— hablo mientras veía al infante caminar hacia la puerta pero el caminar del rubio se detuvo de golpe
—Mamá...—dijo en casi un susurro pero lo suficientemente alto para que el Hatake lo escuchará
—Si?—no recibió respuesta—Qué pasa?—volvió a preguntar obtenido el mismo resultado— Naruto?—se acercó al rubio Uzumaki
—Y si Ero-sennin lo descubre? —pregunto evidentemente nervioso el rubio
—Por eso el medicamento va a estar guardado en la caja que te dí a simple vista son pastillas de soldado, si de casualidad Jiraiya-sama las consume no le harán absolutamente nada después de todo Jiraiya-sama es un alfa, este medicamento está echo especialmente para hacer efecto en omegas y ser discreto después de todo Tsunade-sama aún siendo la mejor ninja médico no pudo detectar rastro alguno del Oboteinai en tu cuerpo, así que no te preocupes por eso—explico tranquilamente y lo más detallado posible volteo a ver el reloj de pared que tenía en la sala ya se les estaba haciendo tarde—Sera mejor que vallamos —hablo para salir de la casa junto al niño de azules ojos
En el camino se encontraron a algunos amigos del rubio de los cuales se despidió así fue todo el camino hasta llegar a las puertas de la aldea donde se encontraba la actual hokage y el sannin de los sapos, el Hatake se acercó al susodicho y le susurro
—Se lo encargo cuídelo muy bien— dijo el peli plata evitando ser escucho por alguien que no fuera el peli blanco
—Lo aré confía en mí—dijo el hombre usando el mismo volumen de voz y con una gran calma junto a una pequeña sonrisa en el rostro
—Confiaré en usted, la seguridad de mi hijo esta a partir de ahora en sus manos tío y no quiero que le enseñe algo fuera de lo necesario para un ninja—respondió para alejarse del mayor e ir con el pequeño rubio, conociendo al sannin hacia cosas nada apropiadas
Después de un rato de charla se despidieron el Hatake camino rumbo a su casa pero en el camino se topo a su alumna quien al verlo se acercó a el
—Sensei...—hablo indecisa la chica
—Que pasa Sakura?—pregunto con cautela era extraño ver a la chica tan pensativa y decaída
—He estado pensado mucho y usted cree que debería...—la chica parecía dudar en lo que estaba apunto de decir
—Deberías que?—
—Debería de superar a Sasuke-Kun?—
—A Sasuke? Te seré honesto puede que te sea difícil pero si para ti es doloroso seguirte aferrando a el es mejor que intentes superarlo pero esa decisión es tuya solo tú puedes decidir que hacer—concluyo el Hatake viendo a su alumna, la chica tenía los ojos abiertos como platos paso un rato para que sonriera
La infante parecía pensar con seriedad las palabras dichas por su maestro—Gracias sensei ya se que hacer!!—dijo la chica para correr rumbo a la oficina hokage—Tal vez sea mejor dejarlo ir, ellos tienen razón lo mejor será que entrene por mi bienestar y no ser un estorbo para mis compañeros en el futuro!!—pensaba con una gran sonrisa la chica
—Me alegra eso...—murmuro el mayor para seguir su rumbo