PORNO!¡ [YUTAE]

¿𝐀𝐥𝐠𝐮𝐧𝐚 𝐯𝐞𝐳 𝐬𝐞𝐫á 𝐬𝐮𝐟𝐢𝐜𝐢𝐞𝐧𝐭𝐞 𝐩𝐚𝐫𝐚 𝐭𝐢?

Despertó realmente cansado, no había tenido una buena semana, pero los grandes y cálidos brazos del alfa hacían que el cansancio desapareciera de apoco.

- Buenos días rubio.- saludó, con los felinos ojos bastante adormilados.- ah~ realmente no quiero trabajar hoy~ - murmuró entre su pecho desnudo.

- te tomaste el día libre, tonto. -dijo Yuta, acariciando los cabellos del Omega con una expresión triste, el corazón le latía con rapidez, debía decirle, sabía que debía decirle, pero simplemente no encontraba las palabras Indicadas.

Y si lo dejaba? Tenia razones ¿y si lo mandaba a la mierda y lo tomaba por traición? Tenia motivos ¿y si se apartaba de su lado, después de haber esperado y luchado tanto? Tenia coherencia.

La mente del rubio era un completo desastre.

- Tierra llamando a Yukkuri.

- ¿Eh?

- ¿estas bien? ¿Que te ocurre? Has estado raro estos días. -formó un adorable pero acusador puchero.

- No es nada... -mintió.

- Te conozco... por favor dime, ¿o no confías confías mi?

- Claro que confío... más que a nadie en el mundo.- dijo, acariciando sus sonrojadas mejillas.-Taeyong... Na- Nancy...

- ¿Si?

- Nancy está...

Dudó en decirlo, sus ojos se llenaron de lágrimas al ver la clara molestia del omega al solo mencionar ese nombre.

- Ella está embarazada.

- ...

Silencio, un incómodo y abrumador silencio, eso fue todo lo que obtuve del acaramelado Omega, quien con una cara de completo impacto, se levantó de la cama y comenzó a vestirse en lágrimas.

- Taeyong, por favor escúchame.

- ¡Callate! -le gritó.- ¡Imbecil tu- todo esto fue una broma para ti, un simple juego! - tomó tus botas y comenzó a vestirse rápidamente, con un Nakamoto intentando llevarle el paso.- no puedo creer esta humillacion.

Yuta lo tomó del brazo, impidiendo así su intento de escape del apartamento.— no es lo que crees, fue hace mucho... realmente, estaba borracho, perdóname, en ninguna otra ocasión en todos estos años intimé con alguien...

-¿¡como supones que te crea?!

- Cariño, por favor... - tenía sus bonitos ojos expresivos repletos de lágrimas, abrazando a su pequeño como aquella última vez en el hospital.- no quiero dejarte ir de nuevo... yo no me casaré ni estaré con ella solo- me haré cargo de mi cachorro, pero no te abandonaré, lo prometo.