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—Estas más hermosa que antes— dice Mina jalandome hasta los sillones para que me siente a su lado

—Tu también‐ la alago

Vino una de las meseras y nos tomó la orden, mientras esperábamos nuestras infusiones hablábamos de cosas triviales

—Y cuéntame amiga ¿Qué ocurrió con el chico al que le diste una piña?— pregunto curiosa la rubia mientras llevaba una poción de lemon pie a su boca

Di un largo suspiro, hace meses que no sabia de él y a mi cabeza vino el chico con el que cruce antes de llegar aquí

—Pues... es algo complicado— comencé a contarle todo hasta el detalle del beso

—¡Te beso!— chilló —¿Y entonces? Son algo, decime que sii

—Niego con la cabeza— no, el dejo Chung-oh hace meses y tampoco me volvió a escribir, así así creo que no vayamos a tener contacto alguno de nuevo

—Me estas diciendo que te beso y esa misma noche salió del pueblo— repitió la rubia intentando procesar la información— que idiota...

—¡Mina!— la rete riendo

—¿Qué? Dime si no es idiota de su parte— me miró de forma obvia acompañada de sus palabras

—No lo niego, fue muy idiota de su parte— me rio

—No lo niego, fue muy idiota de su parte— me rio

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Pov Hyunjin

Antes de retomar nuestro regreso al pueblo Chung-oh, decidimos quedarnos en Seúl un poco de tiempo; lo suficiente como para hacer un cambio a nuestro aspecto

Los demás ya habían hecho su cambio y el ultimo que faltaba era yeji y yo. Así que una vez llegados a Seúl decidí  cambiar mi aspecto ese mismo día

Han había optado por un color azulado, Chan se había decolorado su cabello a un rubio y Changbin oscureció su cabello a negro con unas pequeñas líneas en su flequillo de color verde

Por el periodo de tiempo que estuve descuidando mi aspecto físico, mi cabello había crecido mucho y por mi mente había pensado en cortarlo
Llevaba mis cascos puestos escuchando música y un cubre boca, estaba dirigiéndome por la calle principal del centro de la ciudad; cuando un exquisito aroma atravesó la delgada tela del cubre bocas y llegó a mis fosas nasales
Había extrañado aquel aroma por el cual había hecho perder la cordura aquellos tiempos en los que no pude volver a sentirlos

Busque con la mirada a la exacta dueña de aquel sedante personal para el pelinegro; durante mucho meses no la había visto que se sentía una eternidad—especialmente— para hyunjin

Había estaba la pelinegra escuchando música con una sonrisa plasmada en su rostro y tanto su mejillas como nariz de un color carmesí por el frío que había aquella tarde; a los ojos del pelinegro ella era una obra de arte con carácter, pero a la vez pureza e inocencia. Inocencia que él había perdido en el transcurso de su niñez por culpa de su padre

𝘼𝙢𝙤𝙧 𝙙𝙚 𝙑𝙖𝙢𝙥𝙞𝙧𝙤|𝙃𝙮𝙪𝙣𝙟𝙞𝙣|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora