Prólogo

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- Basta Gael, ya fue suficiente, no puedo seguir con esto - dijo Emma con la voz entrecortada y los nervios carcomiendola - necesito hablar contigo...
- de que quieres hablar?, no vez que llevo meses queriendo tocarte y sentir el dulce sabor de tus labios mientras huelo tu aroma suave y dulce!, te extrañé mucho mi niña - exclamó Gael
- ya no puedo seguir fingiendo todo esto Gael!, no puedo tocarte ni mirarte a los ojos como lo hacía antes, no quiero engañarme a mi misma y mucho menos seguir fingiendo que todo seguira siendo como antes  porque ya no lo es - dice Emma con la voz rota y los ojos llorosos.

Gael sorprendido con las palabras de Emma se aleja de ella, mientras se queda pensativo al verla a los ojos, mientras ella se mantiene fría y serena.

- Entonces dime de que quieres hablar, siento que tu no me extrañaste tanto como yo a ti - responde Gael con una voz suave - Emma se pone la ropa interior mientras Gael se aleja de ella a una distancia prudente para que Emma no se sienta agobiada por el.

- todos estos días no me estoy sintiendo bien, con todo lo que sucedió, yo no puedo seguir con esto que me carcome por dentro, no puedo tocarte ni besarte, porque con cada beso y con cada caricia recuerdo lo que hiciste y la veo a ella en ti, no me siento tranquila con esto Gael...
- mi niña, no me digas que es lo que estoy pensando, por favor te pido que no saques esas palabras de esos labios que acabo de besar - responde Gael con los ojos llorosos y la voz entrecortada, mientras una lágrima roda por su mejilla

- Gael... terminamos.

Un Verano Sin primaveraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora