Hoy es mi primer dia de escuela y la verdad no es algo que me alegra tanto, nueva escuela, nuevos maestros que no hacen mas que hacer de nuestros dias en la escuela sea una pesadilla y lo peor nuevas chicas y chicos que se creen que son el centro atención, yo aborresco a ese tipo de personas. Yo en lo particular evito el contactó con todos, no me considero una chica antisocial, solo me gusta ver bien con quien vale la pena llevarme y con quien no.
No confio mucho en las personas,ya que suelen traicionar a menudo, yo confio en mi adorado hermano James, el es la mejor persona, sabe como aserme sentir bien cuando estoy mal, me da cosejos y me apoya en todo,el mejor hermano que pude haber tenido.
-___________! - me grita James desde la cocina. -Baja a desayunar, hoy es tu primer dia de escuela y debes de llegar temprano.
- Ya voy, deja y termino de vestirme.-le respondi y bajé de inmediato
-Buenos dias hermanita, lista para tu nueva escuela -dijo James sonriente
-No quisiera ir, pero no tengo opción.-respondi asiendo pucheros
- Cuando haces asi pareces una niña pequeña-dijo riendo
-Oyee, aun soy una niña pequeña.-le dije en tono burlon
-Bueno hermanita, lista, es hora de que nos vallamos.
-Esta bien, solo porque mi querido hermano me ira a dejar todos los días iré - le dije abrazandolo y dandole un beso en la mejilla
-Asi que si no te llevo no vas eh? Jajaja eres una convenenciera- dijo con sarcasmo
-Yooo?? Claro que no-dije riendo
-Bien sube al auto, voy por las llaves- me dijo y yo me subi mientras el venia, la verdad tiene muy buen gusto en los autos.
-Heey apurate, se me hara tarde y sera toda tu culpa- el salió corriendo y rapido subió al auto y nos fuimos
-Conmigo llegaras en un abrir y cerrar de ojos, ya verás-dijo sonriendo- ahora hermanita ponte el cinturón de seguridad y sujetate fuerte.
-Siiiii -dije alzando las manos como si fuera algun juego extremo.
En todo el camino iba viendo a todas las personas que iban caminando, siempre me ha gustado observar todo en eso vi aun grupo de chicos, se veia que eran de esa clase de tipos personas que solo desperdician su tiempo echando relajó y viendo con que chica pasar la noche.
Asssh, llegamos creó que es hora de entrar al infierno, pero nadie dijo alguna vez que la vida es justa, y no estoy diciendo que debería serlo.
- Listo llegamos justo a tiempo vez, no había de que preocuparte-exclamo james con una voz victoriosa
-Eres un creido sabes jajaja pero aun asi te quiero, eres el mejor- me despedí de el y salí del auto.
-Yo también te quiero pequeña, alrato paso por ti, recuerda portarte bien eeh
-Si claro-dije riendo- alrato nos vemos, bye.
-Adios! Y cuidate, nos vemos-dijo mientras arrancaba, y se fue
Genial , ahora estoy sola, no conozco a nadie y para acabarla no se donde queda mi maldito salón. Mientras caminaba buscando mi salón choque con alguien, era un chico no muy alto y delgado, cabello negro, ojos cafes, traia un piercing en la nariz y usaba ropa negra.
