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Murmullos se hicieron presentes en el fondo de su muy dispersa mente. Una sinfonía de voces agudas y graves que no hicieron más que saturar cada uno de sus sentidos.

Intentó abrir los ojos muy despacio, una luz brillante tomando el protagonismo al instante, el blanco siendo el único color a la vista y el silencio fue agradable por algunos segundos. Enfocar la vista en un punto específico fue especialmente difícil, pero lo logró.

Una corriente de pánico se apodero de todo su ser en el momento en que vio el lugar en el que despertó.

El hospital.

El médico y las enfermeras se acercaron con lentitud, con el cuidado de no exaltar al muy delicado omega que se sintió desconcertado desde el primer instante en el que recuperó la conciencia.

—Hola Stiles — dijo el médico — nos tuviste preocupados por algún tiempo, ¿Quieres decirnos que fue lo que sucedió? Te haremos algunos exámenes de rutina para ver que todo se encuentre en orden.

Stiles asintió sin saber muy bien lo que sucedía, todo lo que podía rescatar de la maraña de recuerdos en su cabeza fue el estar sentado junto a Derek en el picnic maravilloso que el alfa preparo para él. ¿Cómo fue que terminó en el hospital?

El medico procedió a revisar los reflejos del omega, revisar la dilatación en sus pupilas y algunas pruebas rápidas, indico a las enfermeras que se haría un examen de sangre y las omegas y betas salieron de inmediato de la habitación.

—Stiles, me parece que la última vez que hablamos me dijiste que te irías a vivir a casa de tu padre. Fue por eso que no me preocupe cuando no apareciste a la siguiente cita — el omega bajó la mirada avergonzado, la vedad es que no tenía ganas de discutir sus repentinas e inestables decisiones de vida.

—Lo sé.

—No lo sabes, me pareció dejar muy claro que estar siendo monitoreado con constancia es lo que va a lograr salvar el embarazo, tienes que ser un poco más consciente y ponerme atención — Stiles asintió con cansancio, volvió a sentir un dolor de cabeza intenso y se le nubló la vista por un momento.

—La verdad es que si me iré, tomare el avion en un par de días — observó al médico asentir, esa era una cosa que siempre le había gustado de este tipo, que a pesar de cualquier cosa siempre estaba comprometido con cuidar de la mejor manera a sus pacientes. Stiles incluso llegó a verlo como un ejemplo a seguir, casi como un padre.

—Bien, quiero que tengas muy claro que si algo está pasando es fundamental que me lo digas, podemos llamar a la policía ahora mismo y te aseguro que no tendrías ningún tipo de problemas para irte — el médico observó la forma para nada sutil de un ceño fruncido en confusión.

—¿Por qué razón llamaría a la policía — cuestionó.

—Uh — el médico se frotó la nuca con incomodidad— Porque hay un chico ahí afuera, es un alfa desde que te trajo aquí ha estado muy agresivo diciendo que es tu pareja y que debería poder pasar a verte. En tu registro medico dice que no tienes un alfa y ese tipo se lo tomó muy mal cuando se lo dijimos.

Una sensación desagradable se instaló en la parte baja del vientre del omega — ¿Qué dijo él? — preguntó sin querer saber la respuesta. Era muy obvio que si se encontraba en el hospital era porque Derek lo había llevado hasta ahí en una condición muy mala.

—No dijo mucho, un par de malas palabras y fingió dejarte solo. Ha estado en la cafetería todo el día y mande a que un beta de seguridad lo vigilara. Si él te está amenazando o algo así puedes decírmelo, no estás solo — el hombre mayor volvió a mirarlo, ahora con determinación en la mirada.

The end of the Story || Sterek AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora