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Con cada caricia sobre mi matt estaba consiguiendo que me exitarara cada minuto más los besos de Matt iban cambiando de dirección, de vez en cuando subía y besaba mi cuello y labios

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Con cada caricia sobre mi matt estaba consiguiendo que me exitarara cada minuto más los besos de Matt iban cambiando de dirección, de vez en cuando subía y besaba mi cuello y labios. Sus manos con suaves caricias descendía hacia mi pequeña cintura y cada vez sus manos iban bajando más sus manos callosa empezó a ir en dirección a mi abdomen y con la punta de sus dedos daba un recorrió por todo mi cuerpo, y entre besos y caricias matt bajo su mano hasta mi pantalón y con ello poder desabrochar el botón y bajar el cierre para así poderle facilitar la entrada a mí, al momento en el que su mano iba entrando en mi braga se detuvo y junto nuestras frentes.

Matt: Preciosa - jadeo nuevamente- Dime que podemos hacer esto - Acarició mi cabello, no respondí nada simplemente me acerque a él para volverlo a besar, esa era mi respuesta y el al sentir mis labios junto con los suyos pude sentir como se le salía una sonrisa. Matt continuó con lo suyo y con permiso pudo meter sus dedos debajo de mis bragas, al instante en que el tocó la entrada a mi vagina pude sentir como nuestras respiraciones se iban acelerando.
Lentamente fue acariciando mi clítoris y al tener su tacto en mí no pude evitar jadear con cada caricia sobre mi matt estaba consiguiendo que me excitará cada minuto más.

Matt: Muñeca mira ya como me tienes – jadeo nuevamente y yo en movimientos lentos y suaves me empecé a rozar en su gran erección contra mi vagina, matt no pudo evitar tomarme de la nuca y nuevamente junto nuestros labios pero el beso se volvió cada vez más eufóricos y los latidos de nuestros corazones se podían sentir en la piel de ambos. Murdock paro de besarme y aun que no me viera hizo contacto visual y se le salió una pequeña sonrisa, que entendí perfectamente que es lo que me quiso dar a entender con esa sonrisa, paso sus marcados brazos sobre mi cintura y me volvió a levantarme de la cama para poder cambiar de posición, cosa que no me molesto.
Dejo caer mi cabeza lentamente sobre el suave colchón mientras sentía como sus delicadas manos descendían de mi cintura hasta mi abdomen y lentamente bajaba mi pantalón para así poder quedarme solamente en mis bragas, matt continuo desnudándome entre besos y caricias eso permitió que matt pudiera reconocer mi cuerpo desde mi cintura, muslos, caderas y mis pechos, al tener mi cuerpo al descubierto pudo tocarlas cicatrices que tenía en mi cuerpo, de detuvo en una de mis cicatrices de herida de bala él sabía perfectamente de que se trataba pero simplemente lo ignoro y siguió con lo suyo. Matt se detuvo en un momento y se aproximó a su mesa cajón que estaba aún lado de la cama, abrió el primer cajón y desesperadamente empezó a buscar algo hasta que logro su objetivó, del cajón saco un preservativo y volvió a ira lugar en el que yo me encontraba, al estar junto a mi acarició mi rostro y pronuncio “¿Estas lista?” entre jadeos y gemidos simplemente pude decir “hmmjam”. Matt al escucha mi respuesta empezó a retirar su propia ropa, bajo su pantalón y  al mismo tiempo se deshizo de su sopa interior colocando el preservativo de látex en su pene. Cuando estuvo listo volvió a su posición de antes retirando ahora si por completo mi ropa, con suma delicadeza bajo mi braga por fin desasiéndose de ella la aventó en algún lugar de su habitación, al estarlos 2 listos matt abrió lentamente mis piernas colocándolas en su cintura, matt bajo un poco para quedar un podo más pegados volviendo a juntar nuestros labios antes de ahora si poder estar dentro de mí.
Con una mano en su pene lentamente lo fue introduciendo a mi vagina, el dolor fue nulo ya que con pequeños movimientos matt pudo estar dentro, al ya tener su amigo dentro de mi paro unos instantes antes de empezar con lo suyo, pequeñas embestidas hacía con mi cuerpo sus movimientos eran tiernos y dulces hasta que de mis labios de escuchaban mis pequeños pujidos
Matt: Vamos linda quiero escucharte – empezó a penetrarme cada vez más rápido y duro- quiero escucharte tn- su voz se escuchaba más ronca, él estaba ganado

¿Sargento Barnes? La Hija De Stark Donde viven las historias. Descúbrelo ahora