Señora, Me Equivoqué [GL]

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(Portada original)

(AVISO: ESTA NOVELA ESTÁ TRADUCIDA POR TRADUCTOR, CUANDO TENGA CORRECCIÓN, SE SACARÁ ESTE MENSAJE. SI LEEN, DEBEN ENTENDER QUE HABRÁ POSIBLES ERRORES)

Capítulo 1 - Haciendo la muerte

Tóng Yáo estaba durmiendo la siesta en el coche cuando el vehículo se balanceó de repente, golpeando su cabeza en el proceso. El dolor recorrió todo su cuerpo, haciéndola sentir incómoda.

En ese momento, el coche se convirtió en un carruaje rojo. Si fuera un palacio antiguo, ¿no sería ella una simple concubina?

"¿Qué ha pasado?" Tóng Yáo gritó.

"Señorita, dos sirvientes despistados no estaban siendo cuidadosos y accidentalmente resbalaron, asustándola". Una voz exterior explicó débilmente.

¿Señorita? ¿Sirvientes?

Algo iba mal.

Tóng Yáo entró en una zona brumosa, donde levantó suavemente las cortinas rojas que colgaban de su carruaje y contempló el verdor del exterior. El tiempo era hermoso y el sol brillaba. La brisa se mezclaba con una ligera fragancia floral.

También había otra niña de 13 años con dos moños en la cabeza. Cuando la chica se dio cuenta de que Tóng Yáo asomaba la cabeza, su rostro palideció visiblemente y apretó las manos antes de responder respetuosamente: "Señorita, estamos a punto de llegar".

¿Llegar?

Poco después, el carruaje se detuvo. Cuatro sirvientes bajaron suavemente el carruaje en el que se encontraba Tóng Yáo, sus manos se extendieron suavemente para que Tóng Yáo se sujetara.

Tóng Yáo los miró, eran realmente profesionales, ¿cómo podía ser su actuación tan realista?

"Novena hermana, ¿por qué has llegado tan tarde?"

Tóng Yáo vio aparecer a una hermosa mujer entre los arbustos. La mujer agarró su muñeca íntimamente, actuando como si estuviera increíblemente cerca de ella.

Esta mujer puede ser hermosa, pero su actuación era mediocre. Aunque esta mujer estaba siendo obviamente insincera, seguía pretendiendo mostrar una relación cercana con ella.

Tóng Yáo entrecerró los ojos antes de improvisar una excusa y dijo: "En el camino hace un momento, me retrasaron dos sirvientes".

La hermosa mujer iba ataviada con ropas verdes y sedosas. Llevaba un espeso maquillaje pintado en la cara, que hacía que su piel pareciera tan blanca como la de un fantasma. Si no fuera porque la cara de esta mujer no tenía mala pinta, Tóng Yáo habría salido corriendo del susto.

"Novena hermana, ¿ya has preparado a esa gente?" La hermosa chica tiró de Tóng Yáo hacia un lado y susurró.

Los labios de Tóng Yáo se levantaron ligeramente. Sonriendo, parpadeó y volvió a parpadear, con el corazón confundido.