wildest dreams

nada malo ➳ yunho, ateez

Sábado 27 de agosto

Mensajes acumulados, llamadas perdidas, notificaciones en mis redes sociales.

Yunho de verdad quería hablar conmigo.

Por mi parte, prefería ignorarlo hasta que esta tontería se me pasara. Pero ya había pasado más de una semana y yo seguía igual, hasta me atrevía a decir que me encontraba incluso peor.

Desde mi habitación oigo el timbre. Sé que se trata de él porque mi amiga y compañera de piso repite la misma frase que le ha estado diciendo los dos días que se apareció por aquí. Ambas veces se ha resignado y marchado.

"¡Oye! ¡Dije que no puedes pasar!"

Pero sabía que esta vez sería la excepción.

Ella le exige que se vaya, que yo no estoy para recibirlo. Aún así, en menos de cinco segundos la puerta de mi habitación es abierta casi de un azote.

La última vez que lo vi lo tuve encima mío; tan cálido, dominante y agitado. Y con una oscura mirada que, si fuera posible, me dejaría más desnuda de lo que ya estaba.

Ahora su mirada es diferente, puedo percibir otros sentimientos totalmente diferentes a aquella última vez; alivio y angustia. Probablemente haya muchos más, pero no me atrevo a mantenerle la mirada por más tiempo.

Una tercera voz me aleja de mis pensamientos, se trata de mi amiga tratando de sacarlo con inútiles empujones porque el enorme sujeto se mantiene de pie delante de la puerta, mirándome fijamente.

"Está bien, déjalo" Le digo. Ella nos mira con desconfianza pero aun así se va cerrando mi puerta.

Siempre hemos sido cercanos. Aún cuando éramos sólo amigos estábamos constantemente abrazados, con las manos entrelazadas, o simplemente uno al lado del otro. Supongo que por eso fue inevitable aumentar las muestras de cariño hasta terminar enredados en la cama.

Pasar de no poder separarnos a mantener una distancia de dos metros era doloroso.

Pero no tenía derecho a sentirme mal, yo solita me metí en esto.

"No luces enferma" Su profunda voz me devuelve a la realidad.

"Nunca lo estuve" Me atrevo a confesar. 

"De acuerdo." Ríe sin ganas, herido. Da unos pasos y se sienta en la cama, aún manteniendo la distancia  "¿Se puede saber qué hice para que tuvieras que mentirme?

"No, Yunho. Tú no hiciste nada"

"Algo tuve que hacer, de otra forma no me estarías evitando"

Cuando decidí poner distancia lo hice por el bien de ambos, para no arruinar las cosas. Pero no tomé en cuenta que él podría sentirse culpable, o extrañarme. Eran años de amistad, no podía perderlo por una tontería.

Me acerco a él y tomo su menton para que me mire "No, Yun, no hiciste nada malo" Apoyo mi frente en su hombro, incapaz de sostenerle la mirada "Ese es el problema"

Siento su cuerpo tensarse. "¿Qué quieres decir?"

Mordisqueo mi labio inferior, tomando valentía para seguir "Has sido tan bueno conmigo, me has tratado tan bien que... he confundido las cosas. Por eso puse distancia. Pensé que así se me pasaría, pero estoy peor que nunca. Porque te extraño demasiado"

Su silencio me parece eterno, pero entonces es él quien me toma del mentón para mirarnos a los ojos. Ya no veo angustia, el alivio es incluso más grande, pero hay algo más, algo que no puedo descifrar.

"Supongo que estamos en igualdad de condiciones" Suelta una risita que es como una caricia a mi corazón "Bueno, casi. Yo nunca estuve confundido"

Estoy casi segura que puede sentir mis acelerados latidos, así como ya se percató de mi sonrojo.

"Lamento que hayas tenido que pasar por esto. Nunca fue mi intención asustarte" Acuna mi rostro con sus manos, sus pulgares acarician mis mejillas en un intento por desaparecer mis preocupaciones.

"No fue tu culpa. Debí hablar contigo desde un principio en lugar de apartarte"

"Ya pasó, nena. Ahora estamos bien"

Sonrío ante el apodo. "Y... ¿Ahora qué?"

"Bueno, podemos empezar por... "

Y sus dulces labios atrapan los míos. Contenta le correspondo de inmediato.

⭐⭐⭐⭐⭐

yo? fanática nro 1 del trope friends to lovers